El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó el domingo al vicepresidente de EE.UU., Joe Biden, de organizar una componenda para derrocar su gobierno.
Hablando en cadena nacional de radio y televisión, Maduro dijo que Joe Biden expresó a mandatarios y primeros ministros de países latinoamericanos y del Caribe que el gobierno venezolano sería derrocado.
De esta forma, el presidente venezolano reafirmó los señalamientos hechos el viernes de que su gobierno es blanco de una campaña internacional en la que supuestamente están involucradas varias agencias estadounidenses.
El objeto de la campaña, dijo el mandatario, es desprestigiar a funcionarios venezolanos para así justificar un «golpe de Estado» en el país.
Entonces, Maduro le advirtió al presidente de EE.UU., Barack Obama, que su gobierno en pleno estaba conspirando contra el de Venezuela.
Pero el domingo el presidente venezolano fue más allá y le puso nombre y apellido a su denuncia.
«El poder imperial del norte ha entrado en una fase peligrosa de desesperación; han ido a hablar con los gobiernos del continente para anunciar el derrocamiento de mi gobierno», dijo Maduro.
«Acuso al vicepresidente de EE.UU., Joe Biden. (Él) personalmente ha hablado con presidentes y primeros ministros», añadió.
Según explica el corresponsal de BBC Mundo en Washington, Thomas Sparrow, el vicepresidente Joe Biden organizó la semana pasada una cumbre de seguridad energética del Caribe en la capital estadounidense, en la que participaron casi todos los gobiernos de la zona y en la que se detalló un modelo para que puedan diversificar sus fuentes energéticas.
«Aunque Venezuela no participó en la cumbre, ésta sí fue analizada como una alternativa a la iniciativa Petrocaribe, gracias a la cual países caribeños han recibido petróleo subsidiado de Venezuela durante la última década», agrega nuestro corresponsal.
Maduro y Biden se vieron las caras a comienzos de año, cuando ambos se saludaron en Brasil, donde coincidieron para asistir a la toma de posesión de la presidenta Dilma Rousseff, que iniciaba su segundo mandato.
Durante su alocución del domingo y ante una multitud, el presidente venezolano rechazó lo que calificó como una «campaña desestabilizadora» emprendida por el diario estadounidense The New York Times.
Esta semana, el diario en cuestión publicó un editorial titulado «Maduro en su laberinto» en el que analiza el panorama político y económico de Venezuela.