Un sacerdote de Miami fue suspendido temporalmente luego de que una mujer adulta lo denunció por presunto abuso sexual, reportó una televisora local.
Aracely Martínez dijo a la cadena Univisión que el sacerdote Cristobal de Paula de la Iglesia Católica St. Joachim (San Joaquín) abusó de ella en el 2016.
Aunque hace dos años que Martínez denunció lo sucedido, ahora ha vuelto a retomar la acusación debido a que, según ella, no se ha hecho justicia.
Un comunicado de la Arquidócesis de Miami de octubre del 2016 mostrado por la televisora confirmó que el sacerdote estuvo de licencia administrativa debido a esas acusaciones, luego de que autoridades civiles pusieron fin a su investigación.
El padre De Paula, quien siempre ha negado la sustancia de la acusación, fue reintegrado al ministerio en la parroquia, pero la investigación fue reabierta de nueva cuenta hace tres meses porque Martínez insistió a la Arquidiócesis sobre la violación.
Tras la misa del domingo en la Iglesia San Joaquín un sacerdote informó a los feligreses que De Paula fue puesto en licencia administrativa mientras se investiga una acusación en contra suya “por una grave trangresión de los límites apropiados con una mujer adulta”.
Hace tres días que el sacerdote accedió a renunciar como párroco y se le iniciará un juicio canónico que podría excluirlo permanentemente del ministerio, de acuerdo con la televisora.
La acusación se produce en medio del escándalo de abusos en Pensilvania luego de que la Corte Suprema de este Estado revelara un informe que documenta 300 supuestos casos de «sacerdotes depredadores» sexuales y en el que identifica a mil menores como víctimas desde 1940.