Pekín planea presentar el arma más peligrosa para las fuerzas estadounidenses en la región asiática del Pacífico, durante el desfile militar dedicado al 70º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial. Se trata de misil balístico antibuque Dong Feng-21D, que ya se ha ganado el apodo de ‘asesino de portaaviones’.
China planea demostrar a la comunidad internacional las armas más modernas de su Ejército durante el próximo desfile militar dedicado al 70º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, que comenzará el 3 de septiembre, a las 02.00 (GMT).
El 84% del armamento que exhibirá el país asiático será presentado por primera vez. Entre su arsenal, destaca el misil Dong Feng-21D, que según el coronel del Colegio del Segundo Comando de Artillería, Shao Yonglin, se utilizó por primera vez el pasado mes de agosto durante un ensayo para el desfile, informa ‘Financial Times’.
El DF-21D es un misil balístico de medio alcance diseñado específicamente para atacar a los portaaviones estadounidenses desde arriba, burlando la defensa de la Armada norteamericana a una velocidad hipersónica.
Se trata de un sistema terrestre con un alcance estimado de hasta 1.500 kilómetros. Una vez lanzado, el cohete portador ‘suelta’ un misil de reentrada múltiple, capaz de alcanzar una velocidad de hasta 10-12 Mach.
La velocidad y energía cinética resultante, por no hablar de la carga útil del vehículo de reentrada, causarían graves daños incluso a los buques de guerra más grandes. Nadie lo sabe a ciencia cierta, pero se cree que el impacto directo de un DF-21D podría dejar a un portaaviones fuera de combate o, incluso, hundirlo.
Montado sobre un transportador de ruedas y lanzador, el DF-21D es un todoterreno móvil y, por lo tanto, sería muy difícil localizarlo antes de que realizara un lanzamiento. Además, los expertos militares afirman que 1.200 misiles DF-21D cuestan como un portaaviones estadounidense.