Twitter ha anunciado que suprimirá 336 empleos, el 8% de su plantilla, dentro de un plan para reestructurar la empresa. La medida, comunicada al regulador bursátil estadounidense este martes, llega poco después del nombramiento de Jack Dorsey como consejero delegado tras su regreso a la empresa que fundó hace unos años.
“Hemos tomado una decisión extremadamente dura: despedir a 336 personas”, ha reconocido Dorsey en un correo remitido a todos los empleados. La empresa sigue sin entrar en beneficios tras dos años en Bolsa. “El área de Ingeniería [la más poblada de la empresa] se moverá mucho más rápido con un equipo más pequeño aunque seguirán siendo mayoritarios entre nuestros empleados”, añade Dorsey. El resto de la organización se adaptará de forma paralela.
En el correo electrónico, bajo el título: «Un Twitter más centrado», el máximo ejecutivo de la compañía ha dicho que la decisión responde a un intento por crecer. «Hemos estado trabajando día y noche para crear una nueva hoja de ruta para Twitter, Vine y Periscope». La empresa quiere cambiar la forma en que ha venido trabajando hasta ahora, y afirma que producto e ingeniería serán las áreas con más cambios estructurales para sacar adelante su nuevo plan.
El consejero delegado señala que emprenderán la reestructuración con el máximo respeto por los empleados y que cuidará de todos ellos mediante «generosas indemnizaciones» y prestándoles ayuda para encontrar un nuevo empleo. «No es fácil, pero es lo correcto. El mundo necesita un Twitter más fuerte y era el paso que había que dar», aseguró Dorsey.
Alrededor de 300 millones de personas usan la red social Twitter al menos una vez al mes, la quinta parte de los que usan Facebook, que tiene en torno a 1.500 millones de usuarios, y menos de los que utilizan Instagram, que cuenta con más de 400 millones.
Las acciones de Twitter en el índice tecnológico Nasdaq subían en torno a un 5% en los primeros compases de la sesión del martes.