En Filadelfia, al cerrar la Convención Demócrata, Clinton recurrió a su experiencia para sostener y fundamentar que Estados Unidos está en su mejor momento, ya que todos sus ciudadanos tienen la oportunidad de alcanzar su potencial.
Hillary Clinton inició ayer una fase sin precedentes en la historia política estadounidense cuando aceptó ser la candidata demócrata a la Casa Blanca, con la ilusión de continuar el legado de su marido, Bill Clinton, y del actual mandatario Barack Obama.
En su discurso, la candidata presidencial demócrata se propuso expresar su convicción de que “es necesario dar oportunidades a todos los ciudadanos para que busquen alcanzar su potencial”. Además, Clinton recurrió a su experiencia para sostener y fundamentar que Estados Unidos está en su mejor momento cuando todo el mundo tiene la oportunidad de alcanzar su potencial dado por Dios.
Clinton comenzó a trabajar en el discurso hace varias semanas junto a sus principales asesores, y se dedicó al texto hasta poco antes de ocupar el gigantesco escenario construido en el Wells Fargo Center, en Filadelfia. Se trata de la primera vez que una mujer disputará la presidencia de Estados Unidos en representación de uno de los dos grandes partidos políticos. Para eso Clinton recibió el miércoles el apoyo entusiasta del presidente Barack Obama en la Convención Nacional del Partido Demócrata.
Una de las tareas cruciales del cierre de la Convención para Clinton era la de tranquilizar a los partidarios desilusionados, que apoyaban al senador Bernie Sanders, de que su intención para tratar temas como el libre comercio es sincera. Aunque las encuestas indican que la gran mayoría de los partidarios de Sanders dicen que van a respaldar a Clinton en las elecciones generales. Además, debía usar esta oportunidad para persuadir a los estadounidenses que ella es la mejor opción para dirigir una nación en busca de una nueva era de liderazgo.
Ante una multitud de casi cinco mil delegados del partido reunidos en Filadelfia, Obama dijo que nunca hubo un hombre o una mujer más capacitado y mejor preparado que Hillary Clinton para ser presidente de Estados Unidos, incluyéndose a sí mismo y al ex presidente Clinton en la lista. “¡Vamos a llevar a Hillary Clinton a la victoria este año, porque es lo que el momento pide!’’, dijo Obama. Se trata de una ocasión especial para ambos, ya que Obama derrotó ajustadamente a Clinton en la elección interna en 2008. Después, al llegar a la Casa Blanca la llamó para ser su secretaria de Estado. En esta campaña el presidente nunca escondió su apoyo, más allá de la discreción que le impuso su cargo.
El Partido Demócrata espera ahora poder suceder a Obama, el primer presidente negro en la historia de Estados Unidos, con Clinton, quien sería la primera mujer. Esa posibilidad hace soñar alto a los delegados presentes en la Convención que finalizó ayer en Filadelfia y en la que a Clinton no le han faltado apoyos de peso. El ex presidente Jimmy Carter (1977-1981) se hizo presente mediante un video en el que dejó claro su respaldo a Clinton para ocupar el cargo más importante del país. Por su parte, el ex presidente Bill Clinton (1993-2001) pronunció un largo discurso en el cual narró la historia de su relación con Hillary, en un testimonio muy personal con el que se propuso dar una imagen cálida de la candidata a presidente.
Finalmente, si Bill Clinton se concentró en la Hillary esposa y madre, Obama puso la lupa en la funcionaria pública ejemplar, habituada a la toma de decisiones trascendentales y complejas. “Nada te prepara realmente para las exigencias del Salón Oval. Hasta que te sientas ante esa mesa, no sabes cómo es administrar una crisis global, enviar gente a la guerra. Pero Hillary ya ha estado en ese salón, ha sido parte de las decisiones’’, dijo Obama en su discurso.
La jornada de ayer, la del cierre de la Convención Demócrata, contó también con la hija de Bill y Hillary, Chelsea, entre los oradores. Chelsea Clinton tenía sólo dos años cuando hizo campaña por primera vez con su padre Bill para la gobernación de Arkansas, un respaldo que ha mantenido durante su adolescencia y edad adulta hasta convertirse en un pilar clave para su madre, Hillary. Ya en 2008 presentó a su progenitora como una heroína en la convención demócrata de la que salió elegido como candidato presidencial el entonces joven senador Barack Obama.
Por su parte, el candidato del partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, pidió ayer a sus electores que no vean el discurso de Clinton al aceptar ser candidata por el Partido Demócrata.
“A menos que a usted le guste que le mientan, que lo traten como a un don nadie, que ataquen sus creencias, no miren el discurso de Hillary’’, expresó en un mensaje distribuido por su equipo de campaña.