El Atlético de Madrid y el Real Madrid, protagonistas de las finales de 2014 y 2016, se convirtieron ayer en los dos primeros semifinalistas de la Liga de Campeones tras eliminar al Leicester y al Bayern Múnich en los cuartos de final.
Los otros dos protagonistas se conocerán hoy miércoles tras los partidos Barcelona-Juventus y Mónaco-Borussia Dortmund.
E Real Madrid disputará su séptima semifinal consecutiva en la Liga de Campeones tras derrotar al Bayern por 4-2 en un partido de vuelta para el recuerdo. El conjunto alemán forzó la prórroga, pero Cristiano Ronaldo con tres goles acabó con las esperanzas visitantes.
Después de los 90 minutos, en los que el partido acabó 1-2, la prórroga decidió el nombre del equipo clasificado. Cristiano Ronaldo, con un remate dentro del área en la primera parte del tiempo añadido, y después con un disparo a puerta vacía tras un pase de Marcelo, abrió el camino hacia la siguiente ronda para el Real Madrid.
Asensio, a poco del final, hizo el cuarto del Real Madrid. Por el Bayern, marcaron Robert Lewandowski, de penalti, y Sergio Ramos en propia meta.
Más sorprendió la alineación del Bayern que la del Madrid por la inclusión de los tocados Jérôme Boateng y Mats Hummels en el equipo inicial de Carlo Ancelotti. Robert Lewandowski encabezó el ataque del conjunto germano y fue Isco el que finalmente ocupó el lugar del lesionado Gareth Bale en la alineación titular del Madrid aunque modificando la táctica al jugar el malagueño en la parte más adelantada de un rombo de cuatro hombres en el centro del campo.
ATLÉTICO MADRID PASÓ CON LO JUSTO
El Atlético de Madrid tiró de oficio para lograr el pase a semifinales por tercera vez en las últimas cuatro temporadas.
El equipo rojiblanco se adelantó en el minuto 26 con un cabezazo de Saúl Ñíguez a pase del brasileño Filipe Luis, pero el conjunto inglés igualó en la segunda parte, con un tanto oportunista de Jamie Vardy dentro del área tras una serie de rechaces. Juanfran Torres se retiró lesionado en el minuto 55 del choque en la ciudad inglesa.
La gran novedad en el once de Simeone fue la presencia del jugador José María Giménez.
Se había especulado mucho sobre quién sería el acompañante de Griezmann en la punta de ataque, si Fernando Torres o un ya recuperado Kevin Gameiro.
Pues bien, el ‘Cholo’ decidió apostar por el uruguayo para fortalecer el centro del campo atlético, algo que ya probó el fin de semana en el 3-0 ante Osasuna en la Liga.
El primer objetivo del Atlético era frenar la acometida inicial del Leicester, y éste lo logró sin muchos apuros.
El conjunto de la capital de España apenas pasó apuros en el primer cuarto de hora de juego, demostrando que tenía muy bien aprendido el guion del partido.
Fuente: La Estrella de Panamá