La sonda de la NASA logró tomar unas imágenes únicas del solsticio de Saturno, durante el cual explotó una gigantesca tormenta que rodeó todo el planeta.
El miércoles pasado, la sonda Cassini de la NASA se convirtió en un privilegiado testigo del solsticio de Saturno y documentó con excepcionales imágenes el fenómeno, algunas de las cuales fueron publicadas en la página web oficial de NASA.
El solsticio, el día más largo del verano en el hemisferio norte y el día más corto del invierno en el hemisferio sureño, ocurre en Saturno una vez cada quince años terrestres, dado que este planeta y sus lunas orbitan de manera muy lenta alrededor del Sol.
Según explica la NASA, capturar el solsticio y analizar los cambios en el sistema de Saturno que se producían durante el mismo era el objetivo principal de la Misión de Solsticio de Cassini, la segunda misión extendida de la sonda.
Durante el desarrollo de este fenómeno, Cassini pudo observar la explosión de una gigantesca tormenta que rodeó todo el planeta. «El sistema de Saturno experimenta unas transiciones dramáticas de invierno a verano, y gracias a la Cassini, pudimos presenciarlo desde un asiento de primera fila», comenta Linda Spilker, integrante del proyecto de Cassini en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (California).
La sonda Cassini llegó a Saturno en 2004 para analizar con detalle Saturno con sus anillos y lunas. Durante su primera misión extendida de 2008 a 2010, llamada Misión Equinox, consiguió estudiar cómo la luz del sol impactaba sobre los anillos del planeta, proyectando unas sombras que descubrieron nuevas estructuras en estos. La NASA decidió después una extensión adicional de siete años, la Misión de Solsticio, que empezó en 2010.