Un vídeo de la Asociación Nacional del Rifle dibuja un país al borde del estallido y manipulado por los medios, Obama y las estrellas de Hollywood.
El vídeo dura un minuto. No hace falta más. Bastan 60 segundos, intensos y bien afilados, para ver el mundo con los ojos de la derecha radical estadounidense y posiblemente del propio presidente Donald Trump. Ahí está todo lo que odian: Barack Obama, el Hollywood contestatario, The New York Times, las escuelas progresistas, la resistencia… Los enemigos de América cuya “violencia de mentiras hay que combatir con el puño cerrado de la verdad”.
En origen el vídeo no es político. Se trata de un anuncio de la Asociación Nacional del Rifle que trata de sensibilizar sobre los peligros que corre la libertad patria. Pero el resultado no puede ser más escorado. Muestra una nación al borde del estallido, barrida por la violencia progresista, un país en blanco y negro, de buenos y malos, de aterrorizados seguidores de la ley y manifestantes vandálicos. La descripción inflamada de ese universo maniqueo corre a cargo de Dana Loesch, antigua editora de Breitbart, el medio ultra que dirigió el actual estratega jefe de la Casa Blanca, Stephen Bannon. Portavoz de la Asociación Nacional del Rifle, no es raro verla en convenciones de republicanos con vestido de cuero ajustado y fustigando a su audiencia con proclamas radicales. Algo parecido a lo que hace en la grabación.
Sin dar tregua, atiza a los medios que “asesinan la verdad”, a las escuelas que, a su juicio, comparan a Trump con Hitler, al Hoollywood que machaca con su narrativa rebelde, y al expresidente que apoya a la resistencia, es decir, a esos manifestantes que no hacen otra cosa que gritar racismo, sexismo, xenofobia y homofobia. “Que rompen ventanas, queman coches, cortan carreteras y aeropuertos, acosan y aterrorizan a los cumplidores de la ley hasta que la única opción que dejan a la policía es hacer su trabajo y poner freno a la locura”. Un mundo abismal donde las salidas ya son pocas. “La única forma de acabar con esto, la única forma de salvar nuestro país y nuestra libertad es combatir esta violencia de mentiras con el puño cerrado de la verdad”, sentencia Loesch con voz de látigo.
El maniqueísmo, la criminalización de los opositores, pero sobre todo la agresividad del mensaje, han desatado una inmediata contestación. Organizaciones no gubernamentales y destacados demócratas han alertado sobre su profunda carga de violencia y han pedido la retirada del anuncio. Loesch, amante de la polémica, ha dicho que de ningún modo dará marcha atrás. “Nadie ha llamado a las armas” ha sido su argumento. El vídeo, entretanto, se ha viralizado. Sus 60 segundos han dado en el blanco. Como una bala.