BARCELONA — El Mónaco. No pudo haber un final de octavos de final más explosivo que comprobar como el Mónaco echaba de Europa al todopoderoso Manchester City, para redondear una ronda repleta de emoción, que comenzó con el 4-0 de París y acabó con este 3-1 de Mónaco. Impresionante.
Así, los cuartos ya tienen a sus protagonistas preparados. Si el Barcelona hizo historia con la mayor remontada de la historia frente al PSG, el Leicester lo hizo derribando contra pronóstico al Sevilla y ambos estarán en el sorteo junto a Juventus, Bayern, Real Madrid, Borussia Dortmund, Atlético y Mónaco.
Entre la épica del Camp Nou y la campanada del Louis II, los octavos de final dejaron para el recuerdo esa fiesta en el King Power Stadium, la goleada de Dortmund, el despertar merengue en San Paolo y esa campanada inesperada para la conclusión. Todo ello sin olvidarse de la exhibición de Oblak en el Vicente Calderón para apagar las pocas esperanzas que pudiera tener el Bayer Leverkusen.
MONACO-MANCHESTER CITY 3-1
La bomba. El Manchester City, cuya plantilla tiene un valor de mercado superior a los 500 millones de euros e invirtió por encima de los 200 esta temporada, cayó en Mónaco. Incapaz de mantener el 5-3, milagroso, de la ida, fue primero barrido y después incapaz.
En media hora perdía 2-0 para irse al descanso sin un triste disparo a la portería de Danijel Subasic. Y aunque mejoró sus prestaciones en la segunda mitad, dominó y dio la sensación de estar en disposición de cumplir la lógica, no llegó a imponer casi en ningún momento su personalidad.
El fracaso para un Manchester City que en dos temporadas ha gastado 425 millones de euros en fichajes es indiscutible, para ser, además, la primera vez desde que es entrenador que Pep Guardiola no llegará a las semifinales de la Champions.
JUVENTUS-PORTO 1-0
Sin rival. La Juve sentenció al Porto en la ida y le enterró en la vuelta, sin margen a que el equipo luso soñase con una remontada imposible. La eliminatoria quedó convertida en un simple trámite en cuanto Maxi Pereira se autoexpulsó y Dybala marcó de penalti.
El equipo bianconero, que sumaba 16 encuentros de Champions sin perder en Turín, no dio opción a un Porto muy plano, poco convencido de sus posibilidades y que apenas remató dos veces a la puerta de Gianluigi Buffon, que despidió a Iker Casillas con un abrazo, pero sin ninguna piedad. Porque la Juventus no conoce, en el campo, la piedad.
LEICESTER-SEVILLA 2-0
La fe. Campeón de la Liga Europa y futbolísticamente muy superior al rival, el Sevilla se hundió en la miseria, simplemente, por darle al Leicester la oportunidad de creer en sus posibilidades.
El equipo inglés ha recuperado con Shakespeare la personalidad que le convirtió en leyenda a las órdenes de Ranieri la pasada temporada y en un magnífico ejercicio de supervivencia, fe, ambición e intensidad volteó una eliminatoria en la que nunca tuvo el papel de favorito.
El equipo de Sampaoli dominó en el King Power Stadium, pero nunca mostró los galones futbolísticos que se le suponían y dio alas a un Leicester que, renacido, sigue haciendo historia en Europa.
ATLÉTICO-BAYER LEVERKUSEN 0-0
El trámite de Oblak. En cuadro por las bajas y con un resultado desastroso en la ida, el Bayer Leverkusen acudió al Calderón sin apenas expectativas de darle la vuelta a una eliminatoria que el Atlético dejó resuelta en Alemania.
Pero el equipo germano bien pudo poner en aprietos a los de Simeone, que se clasifican por cuarta temporada consecutiva para los cuartos de final y que sostuvieron su portería a cero gracias a la exhibición de su portero, un Oblak que llegó a desesperar al Bayer.
Fuente: ESPN Digital.