*Tranques, quemas, destrozos a vía e instituciones públicas han sido algunas de las consecuencias generadas por la violencia impulsada por los golpistas en el país.
La violencia exhibida por grupos vandálicos desde el pasado 18 de abril en Nicaragua, ha ocasionado decenas de muertos y heridos, al tiempo que generó graves daños y destrozos a diversas instituciones de la nación.
Los hechos violentos que mantienen en tensión a los nicaragüenses fueron organizados por sectores opuestos al Gobierno del mandatario Daniel Ortega, utilizando como excusa la reforma del Seguro Social.
Sin embargo, una vez derogada la modificación persiste la violencia y se niegan al diálogo, pese a los llamados reiterados emitidos por el Gobierno.
¿Qué han generado los focos golpistas en Nicaragua?
Si bien no es una violencia extendida en la nación, los ataques reiterados de grupos vandálicos a la ciudadanía han ocasionado grandes daños en varios ámbitos.
Según el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), el vandalismo promovido por sectores violentos ha ocasionado el deterioro de las principales vías, lo que impide el libre tránsito de la ciudadanía, además de limitar la capacidad de respuesta de equipos auxiliares en caso de que se presente una situación de emergencia nacional.
Asimismo, los ataques reiterados a centros médicos, instituciones públicas, calles y transporte han afectado la infraestructura de la nación. Incendios, destrozos, ataques con morteros son algunas de las acciones registradas en Nicaragua en las últimas semanas por parte de los manifestantes violentos.
Otro de los rubros que se han visto afectados por estos hechos es el educativo. La quema de instalaciones como el Centro Universitario de la Universidad Nacional y las agresiones a centros de estudios obligaron a la suspensión de las clases, lo que repercute en el desarrollo formativo del pueblo nicaragüense.
Todas estas acciones han generado un costo importante para la nación. Las pérdidas materiales superan los 233 millones de dólares, alrededor del 1.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación.
Insistencia con el Diálogo
El Gobierno de Daniel Ortega ha resaltado que los sucesos violentos que sacuden al país son generados por grupos delincuenciales que buscan destruir la seguridad y la vida de las familias nicaragüenses y ha instado, en repetidas ocasiones, a promover un diálogo que fomente la unión entre los nicaragüenses.
Tras una reunión con Ortega, la Conferencia Episcopal de Nicaragua confirmó la presentación de una propuesta de democratización para decidir si se retoma el diálogo nacional suspendido desde el 31 de mayo.
«El diálogo con el Presidente transcurrió en un ambiente de serenidad, franqueza y sinceridad, en el que hemos planteado al Señor Presidente el dolor y angustia del pueblo ante la violencia sufrida en las últimas semanas y la agenda consensuada en la Mesa Plenaria del Diálogo Nacional, sobre la democratización del país», señalaron los obispos en un comunicado.
El encuentro con el presidente Daniel Ortega fue solicitado por los prelados para «valorar la conveniencia» de relanzar el diálogo nacional, que la propia Conferencia Episcopal suspendió.