Una prueba más de que las ONG opositoras van tras el poder político en Nicaragua. El Secretario de la Junta Directiva de la CPDH, Ariel Montoya, se lanzó en 2017 como candidato a alcalde de Managua, utilizando la casilla de la Alianza por la República (APRE).
La respuesta de la CPDH fue de forma: “Se sugiere que el señor Ariel Montoya solicite una separación temporal de sus funciones dentro de la Junta Directiva de CPDH para que su participación en el ámbito político partidario no afecte la visión de independencia e imparcialidad que CPDH ha proyectado”.
Mientras tanto, los directivos de la CPDH presentaron cuentas sobre el monto del dinero con que cuentan y de las gestiones que hace su director ejecutivo, Marcos Carmona, para llenar más las arcas con fondos norteamericanos.
La CPDH, en este informe, revela que opera con financiamiento de la Pan American Development Foundation (PADF), un organismo creado por la OEA en 1962 como apéndice de la Alianza para el Progreso gringa. Actualmente recibe millonaria ayuda de la USAID.
Igualmente, Carmona y su gente obtienen miles de dólares de la National Endowment for Democracy (NED), un reconocido organismo desestabilizador que se da el lujo de gastar anualmente 30 millones de dólares para financiar en América Latina a partidos políticos, sindicatos, grupos opositores y ONG derechistas. El fin: atacar a gobiernos progresistas.
Este es el documento en poder de Nicaleaks: