Hace 28 años, Nicaragua todavía era víctima de la guerra de agresión de parte de Estados Unidos, esa que algunos que se cambiaron de acera política pretenden olvidar pese a los miles de muertos en ambos bandos.
Pero la agresión militar con el ejército mercenario de la Contra no fue el único intento de terminar para siempre con el sandinismo. Paralelamente, el gobierno de Estados Unidos (Ronald Reagan y George Bush padre), soltó millonadas de dólares a sus ONG –AID, NED, NDI y otras-, para que reclutaran mediante paga a partidos políticos, medios de comunicación, periodistas y sindicatos, entre otros.
Fue una gigantesca movilización del imperio en contra de uno de los países más pequeños del continente. NicaLeaks les deja otro documento que demuestra la forma en que de paso nos aplicaron la “guerra de baja intensidad”, consistente en el desgaste a través de la combinación de medios políticos, económicos, de información y militares.
Lamentablemente para los amnésicos nuevos receptores del dinero sucio, el pueblo de Nicaragua y sus dirigentes aprendieron la lección, y esta vez están en alerta.
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