Noor Salman, pareja de Omar Siddique Mateen, ha reconocido que temía que pudiera atacar un local esa noche.
La investigación del FBI sobre los posibles motivos que llevaron a Omar Siddique Mateen a perpetrar una masacre en el club Pulse de Orlando el pasado domingo tiene un nuevo protagonista. Su esposa, identificada como Noor Salman, ha reconocido que temía que pudiera atacar un local esa noche y que le hizo prometer que no lo haría, según fuentes oficiales citadas por la cadena NBC.
Salman, que no avisó a la policía a pesar de sus temores, podría enfrentarse a cargos criminales en los próximos días. Agentes del FBI implicados en la investigación han desvelado que acompañó al autor de la matanza a varias localizaciones donde podía haber llevado a cabo el mismo ataque en los últimos dos meses.
Además de visitar con él el club Pulse, acudieron al parque temático de Walt Disney World y al centro comercial Disney Springs, ambos a las afueras de Orlando, uno de los epicentros turísticos de Estados Unidos.
Las autoridades intentan determinar aún si Salman conocía el lugar y el momento en el que Mateen iba a atacar, y por qué no avisó a las fuerzas de seguridad.
El senador Angus King, que ha sido informado de los avances de la investigación, declaró este miércoles a la cadena CNN que la esposa del tirador tenía “algo de información” de lo que estaba ocurriendo y “está cooperando con las autoridades para aportar algunos datos importantes”.
Por otra parte, el padre del asesino, Seddique Mateen, declinó valorar la investigación a la esposa de su hijo, que murió abatido por la policía. “El FBI siempre hace un trabajo profesional y los apoyaré hasta donde sea capaz”, dijo a la prensa. El padre negó que su hijo pudiera ser homosexual, como han dicho algunos conocidos, que han destapado numerosas dudas sobre su identidad sexual y la presunta doble vida del tirador.