Washington busca fortalecer las alianzas tradicionales y construir «nuevas colaboraciones con otras naciones».
EE.UU. se enfrenta a «las crecientes amenazas de potencias revisionistas tan diferentes como China y Rusia», ha afirmado el secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, que ha agregado que estos países suponen para EE.UU. una amenaza más grave que el terrorismo. En lo que se refiere a la estabilidad global, Mattis ha señalado a Corea del Norte e Irán como las principales amenazas.
El alto funcionario ha explicado que Moscú tiene como objetivo destruir la OTAN y modificar las agendas de seguridad de Europa y Oriente Medio para que le sean favorables, mientras que China recurre a su «economía depredadora» para «intimidar a sus vecinos» y «militarizar» la infraestructura en el mar de China Meridional.
«Continuaremos la campaña contra los terroristas, pero ahora es la gran competición por el poder —y no el terrorismo—el foco principal de la seguridad nacional de EE.UU.», ha aseverado Mattis este viernes anunciando la nueva Estrategia de Defensa Nacional de Estados Unidos.
«Vamos a construir una fuerza más letal», ha declarado el secretario de Defensa, que también ha dicho que Washington fortalecerá las alianzas tradicionales y construirá «nuevas colaboraciones con otras naciones».
Además, Mattis ha resaltado que modernizará «capacidades clave» de las Fuerzas Armadas norteamericanas. «Las inversiones en el espacio y el ciberespacio, las fuerzas disuasorias nucleares, la defensa antimisiles, los sistemas autónomos avanzados y la logística resistente y ágil proporcionarán a nuestras tropas de alta calidad lo que necesitan para ganar», ha rematado el secretario de Defensa.
«A pesar de la derrota del califato físico de Estado Islámico, las organizaciones extremistas violentas —como Hezbolá en el Líbano, Estado Islámico y Al Qaeda— continúan mostrando odio, destruyendo la paz y asesinando a inocentes en todo el mundo», ha recalcado Mattis.