Las agencias desestabilizadoras extranjeras han tenido “malas experiencias” con organizaciones nicaragüenses en cuanto al manejo de fondos, por lo que desde hace algunos años obligan a los ONG opositores a entregarles “informes financieros y narrativos acorde a lo establecido en su convenio” con el fin de que no desvíen los fondos hacia sus arcas personales.
Un documento revelador de la NED, demuestra por demás la forma humillante en que los organismos que financian los ataques de la “sociedad civil” contra el gobierno trata a sus “aliados” locales, en quienes obviamente no confían, pero no tienen “otro palo donde ahorcarse”.
Aquí el documento: