El presidente mexicano dio un ultimátum: «o se reanudan las clases o no habrá más diálogo» con los maestros suscritos a la Coordinación Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció este lunes que suspenderá el diálogo con los maestros opuestos a la reforma educativa sino se reanudan las clases.
«No podemos hacer rehenes a los niños y jóvenes del país a partir de ninguna causa o demanda», expresó Peña Nieto al encabezar la ceremonia de inicio del curso escolar 2016 – 2017, en la que fuera su escuela primaria, en Toluca, México.
El presidente mexicano pidió a los miembros del sindicato Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) regresar a clases porque «el futuro de la niñez no es negociable».
El mandatario fue más a fondo en su discurso y refirió que el «futuro de México no se puede negociar», en referencia a la reforma educativa.
La mayoría de las escuelas de educación básica del sector público permanecieron cerradas en los estados de Oaxaca, Michoacán y Chiapas, los estados más pobres del país.
Bajo el argumento de elevar la calidad educativa del país, la reforma educativa de 2013 impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto propone la evaluación obligatoria para que los maestros pueden ingresar y mantenerse dentro del sistema educativo, así como también para poder acceder a mejores sueldos.
Los docentes y el CNTE entienden que la reforma es una manera de justificar despidos que podrían resultar innecesarios.
En el municipio de Oaxaca ocho personas murieron el 19 de junio del año pasado tras un enfrentamiento entre policías y civiles armados en el marco de una protesta de maestros.
CNTE realiza marchas y ratifica que el paro sigue.
Las manifestaciones coincidieron con el inicio del curso escolar 2016-2017, ocasión que los maestros mexicanos aprovecharon para ratificar su decisión de proseguir el paro en contra de la reforma educativa.
Integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores del Educación (CNTE) de México realizaron este lunes una marcha por el centro de la capital azteca en contra de la reforma educativa, promulgada por el presidente Enrique Peña Nieto y en demanda de la reinstalación de la mesa de diálogo con la Secretaría de Gobernación (Segob)
Los manifestantes partieron del Zócalo hasta el Antimonumento a los 43, ubicado en Avenida Paseo de la Reforma, y ratificaron la decisión de proseguir el paro indefinido, que impidió este 22 de agosto el inicio en varios estados del curso escolar 2016-2017.
“Hoy no podemos creerle (a Peña Nieto); el paro indefinido del magisterio seguirá”, expresó Enrique Enríquez, dirigente de la sección novena de la CNTE, al concluir la marcha.
La CNTE rechazó la opinión del presidente Enrique Peña Nieto sobre el condicionamiento de que la educación es primero que el diálogo, pues fue el gobierno federal “desde hace más de un año quien cerró la mesas de diálogo”, mientras los maestros daban clases.
Además, diversos dirigentes se pronunciaron en contra de las “versiones oficiales” de la Secretaría de Educación Pública (SEP), las cuales afirman que el «paro de labores» se concentró parcialmente en solamente cuatro estados, y que el inicio del ciclo escolar fue “casi total” en todo el país.
“Hubo paros y movilizaciones en 28 estados del país, incluyendo la Ciudad de México», señaló Adolfo Gómez Alvarez, de la sección 7 de Chiapas.
En ese estado, el paro fue impulsado «por el 95 por ciento de los compañeros» que acusan al Gobierno del presidente Enrique Peña de «irresponsabilidad», por no pedir al Congreso abrogar la reforma educativa «y no buscar ninguna alternativa de solución», aseveró Jesús Mendoza, líder magisterial.
Otro estado afectado fue Michoacán, donde escuelas que atienden a casi medio millón de los 1,2 millones de alumnos, no iniciaron el ciclo escolar.
Respaldo a maestros
«Gobernador de Zacatecas respalda al SNTE, dice la líder local», así refleja en uno de sus titulares del diario La Jornada, de México, que se hace eco de las declaraciones de Soralla Bañuelos de la Torre, secretaria general de la sección 34 del SNTE, quien expresó que sostuvo “una fructífera reunión con con el gobernador electo de Zacatecas, Alejandro Tello Cristerna, quien respalda el trabajo de la dirigencia del SNTE”.
En tanto, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, acudió a la marcha de este lunes un grupo de católicos de la diócesis de San Cristóbal, encabezado por el sacerdote indígena Marcelo Pérez Pérez, párroco de Simojovel, quien manifestó a los profesores: “Estamos con ustedes porque han despertado la conciencia de que las reformas estructurales responden a intereses de organismos financieros internacionales. Por eso el gobierno quiere imponerlas con balas”.
“Si tocan al magisterio nos tocan a todos. Que sepa el gobierno que dentro del magisterio muchos son servidores de la diócesis, catequistas o ministros de la eucaristía. Venimos a unir nuestras voces para que el gobierno resuelva el conflicto por medio de diálogo. Exigimos en nombre de dios solución y no represión”, advirtió.
Sostuvo que “si un cristiano no es revolucionario en este tiempos no es cristiano, y por eso hoy la Iglesia no puede quedarse al margen en la lucha por la justicia”.
En contexto
El rechazo a la iniciativa que modifica las leyes secundarias reglamentarias de la reforma educativa ha propiciado que miles de maestros agrupados en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), intensifiquen las protestas.
Las manifestaciones buscan frenar la reforma que, entre otros asuntos, estandariza la evaluación docente y mantiene cuestiones que los maestros han denunciado como una forma de precarización de su labor como los contratos a prueba con evaluaciones anualmente.