* También pondrán la denuncia ante el CENIDH y CPDH, aunque persiste la duda sobre si estas ONG opositoras, alineadas con el PLI y generalmente selectivas en la recepción de casos, los escucharán y pondrán atención a lo planteado.
Integrantes de los grupos Rejudín y Forfunic que participan los miércoles en las marchas de protesta en las inmediaciones de Metrocentro, anunciaron que demandarán judicialmente al concejal liberal Omar Lola y al dirigente del PLI, Eduardo Montealegre, por la agresión y lesiones sufridas durante la última jornada.
También dijeron que pondrán la denuncia del atropello ante el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) y la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), aunque expresaron sus dudas de ser recibidos, habida cuenta de que ambas ONG opositoras están alineadas desde hace varios años en el bando del PLI.
¿Y la cacareada objetividad?
El miércoles 4 de noviembre, integrantes del PLI que participaban en la marcha opositora se lanzaron en contra de los miembros de Rejudín y Forfunic, a los que precisamente Montealegre volvió a acusar de ser “infiltrados” del gobierno.
Pese a que la descripción de los medios afines al PLI ubica a los ex aliados de Montealegre como los que iniciaron la agresión, lo cierto es que en las fotos que publica el diario La Prensa se observa a David Campos desarmado, buscando refugio en una valla de impasibles antimotines, mientras es golpeado impunemente por el concejal Omar Lola.
Igualmente, otras fotografías muestran a jóvenes de Rejudín siendo golpeados en el suelo por furibundos militantes del PLI encabezados por Lola, quien dijo que ellos son “una manada” y que así se defienden.
Pese al ataque con ventaja e impune de los del PLI, Montealegre y Lola insistieron en criticar a la Policía Nacional por no poner el orden. ¿Qué habría pasado si los agentes hubieran impedido el ataque contra Campos y otros? Es de imaginar lo que estarían diciendo ahora.