Esta vez los argentinos fueron a “darlo vuelta”. Este miércoles, durante la jornada más reciente de la fase de grupos de Champions, tres goleadores protagonizaron dos remontadas. El Borussia Mönchengladbach abrazó hasta el último minuto la ilusión de salvar un punto como local contra el Manchester City después de haber empezado ganando.
Pero en el minuto 90 una falta en el área contra Sergio Kun Agüero, que él mismo convirtió desde el punto de penalti, hizo trizas la esperanza de los alemanes y dejó el encuentro 1-2. En el partido entre el Atlético y el Benfica (1-2), un gol de Nico Gaitán y una asistencia suya liquidaron al equipo colchonero, que había abierto la cuenta en el Vicente Calderón con un tanto de Ángel Correa, debutante en el torneo.
Los futbolistas argentinos están diseñados para responder con obstinación ante los resultados adversos: “vamos a darlo vuelta”, repiten cuando los periodistas les preguntan qué planea su equipo tras un marcador desfavorable. El Valencia perdía 3-0 contra el Barcelona en el minuto 53 de un encuentro por la Liga española del 98, hasta que una asistencia y dos goles de Claudio El Piojo López y un tanto de Ariel El Burrito Ortega destrozaron al cuadro culé que por entonces dirigía Louis van Gaal. Sin ir más lejos, en la Liga de 2007, un imberbe Gonzalo Higuaín marcó el 4-3 definitivo en el último instante de un Madrid-Espanyol en el que los merengues estuvieron perdiendo por dos goles durante la mayor parte del encuentro. El Madrid se puso líder y a la larga se coronó campeón.
Ángel Correa hubiera querido que el Atleti ganara con su primer gol en Champions, pero Nico Gaitán se interpuso con un nuevo capítulo de las remontadas argentinas. El Atlético, que sufrió por el buen fútbol del extremo este miércoles, había sondeado la posibilidad de ficharlo el pasado verano. A cambio, tuvo que ver cómo empataba el partido a favor del Benfica con un remate cruzado al segundo palo de Oblak. En la otra mitad, el 10 argentino se descolgó por la izquierda en un contragolpe. Tiago lo siguió, pero no apretó la marca, y un recorte bastó para sacarse de encima a Godín. Gaitán centró con la derecha, con un balón tan medido que rebotó en las narices a Filipe Luis y le cayó a Gonçalo Guedes, que anotó desde un ángulo tan agudo como la precisión del mismo centro.
El Kun Agüero tampoco se rindió. Ningún equipo inglés había ganado en el campo del Gladbach, pero el incisivo delantero regateó en el área al norteamericano Fabian Johnson tras el rebote de un tiro de esquina en el minuto 89, recibió una falta y anotó de penal el 1-2 para darle la primera victoria a su equipo en esta edición de Champions. Desde el minuto 54, cuando el City había encajado el 1-0, sabía como Gaitán contra el Atleti, que no tenía otra posibilidad: como jugador argentino tenía que darlo vuelta.