* Aparte, recibía otro montón de dinero de distintas agencias extranjeras, gringas y europeas hostiles al sandinismo. Una historia teñida de traición de parte de un exmiembro de la DN del FSLN en los años 80. Fondos eran triangulados a través del National Democratic Institute, uno de los engendros de Madeleine Albright, quien mantiene contactos con la Internacional Socialista.
Siete días después de iniciado el intento de golpe de Estado contra el gobierno sandinista, el egresado de Harvard, Jaime Wheelock Román, envió una carta presuntamente “amistosa” al presidente Daniel Ortega, en la que hacía suyos los planteamientos de los golpistas y pedía, entre otras cosas, acuartelar a la Policía y al Ejército, y derogar el decreto del INSS que ocuparon como excusa.
Wheelock Román fue miembro director de la facción denominada “proletaria” del FSLN en los años 70 y fungió como ministro de Agricultura durante la época revolucionaria de los años 80. Cuando el FSLN perdió las elecciones en 1990 debido a la guerra de agresión gringa, don Jaime partió hacia Estados Unidos -el país agresor- a sacar una maestría en administración pública.
Al volver fundó el Instituto para el Desarrollo y la Democracia (Ipade), que de inmediato se convirtió en un eje de ataque en contra del sandinismo histórico que había quedado muy golpeado tras la traición del MRS en 1995, año en que, coincidentemente, Wheelock Román instituyó la ONG que tan buenos réditos económicos le brindó.
Para que nos hagamos una idea, el Ipade, una ONG que conspiró abiertamente en contra del sandinismo, operaba con US$ 800,000 anuales que le aportaba la United States Agency for International Development (USAID), sin incluir las “donaciones” que recibía de otras agencias gringas y europeas.
La USAID triangulaba el financiamiento al IPADE a través del National Democratic Institute (NDI). Fundado en 1983, es otro de los engendros de Madeleine Albright, ex Secretaria de Estado gringa, quien funge como presidenta. Se nota que Wheelock no desaprovechó el tiempo mientras estuvo estudiando en Estados Unidos.
El NDI se mercadea como una oenegé de ideología “progresista” (¿?) y sostiene relaciones con organizaciones y partidos en al menos 70 partidos en el mundo. Uno de sus contactos es la Internacional Socialista, grupo que hace poco expulso al FSLN de sus filas. ¿Una casualidad?
Los 800 mil dólares anuales que destinaba para el IPADE provenían de fondos federales fiscales del gobierno norteamericano, camuflados bajo la figura de que eran para “el desarrollo y la democracia”.
Esa “vocación” democrática de don Jaime es la que ha venido demostrando desde la fundación del IPADE, y sobre todo a partir de 2007, con la negación de los derechos del sandinismo, mismos que decía defender “a capa y espada” cuando fue miembro de la Dirección Nacional del FSLN, cuando gozaba de grandes privilegios, mismos que perdió tras la derrota electoral de 1990, que en su caso y el de otros traidores, fue también una derrota moral.
Cuando les fue cancelada la personería jurídica, los directivos del IPADE se quejaron ante los medios de comunicación de la derecha, alegando que el motivo fue por “haber denunciado las violaciones a los derechos humanos de los nicaragüenses desde el pasado 18 de abril”.
¿Qué hacía el IPADE con los 800 mil dólares que recibía de la USAID y el otro montón de dinero de otras agencias extranjeras injerencistas? Una de sus principales tareas fue intentar sabotear las distintas elecciones generales y regionales y por supuesto, desacreditar a las autoridades nacionales sandinistas.
Este es un documento que prueba el financiamiento que recibía el IPADE: