Las agencias norteamericanas que financian proyectos a las oenegés opositoras de Nicaragua reciben plata de los contribuyentes estadounidenses. Resulta que el Congreso norteamericano es el que aprueba los fondos para inmiscuirse en los asuntos internos de los países, cuyos gobiernos, no son del agrado de Washington, como es el caso de Nicaragua, sin lugar a dudas.
Pero, ¿cómo llega a Nicaragua ese dinero? El proceso es sencillo. Tras la aprobación de los fondos por parte del Congreso, los mismos son entregados directamente a organismos gubernamentales de EE.UU como USIA, AID y uno aparentemente privado, denominado NED ((National Endowment for Democracy).
Estos a su vez entregan diversos montos a organismos nicaragüenses de la llamada “sociedad civil”, organismos que ellos mismos han venido creando, así como a partidos o movimientos políticos que ellos consideran “confiables”
Uno de los organismos receptores de esos fondos es el NED, que fue establecido en 1983, como el brazo político del “Proyecto Democracia” de la administración Reagan, bajo la coordinación del Consejo de Seguridad Nacional.
El NED se presenta como una organización privada sin fines de lucro y los fondos que recibe de la USAID los distribuye a través de cuatro organizaciones concesionarias básicas; The Free Trade Union Institute (FTUI), el National Democratic for Inter-national Affairs (NDI), el National Republican Institute for International Affairs (NRI o IRI) y el Center for International Private Enterprise (CIPE).
Según su acta de fundación el NED proporciona fondos a agrupaciones en el extranjero que trabajan en pro “de los derechos humanos”, los “medios de comunicación independientes” y una amplia gama de “iniciativas de la sociedad civil”, bajo la ficción de que los receptores de sus fondos reciben dinero de particulares, y no del Gobierno de Estados Unidos.
Uno de los correos que tenemos en nuestro poder, reafirma el compromiso que Carlos Fernando Chamorro Barrios, director del Centro de Investigación de las Comunicaciones, CINCO y de varios medios de comunicación como Confidencial, Esta Noche, Esta Semana, Onda Local y otros.
En el correo se le recuerda a Chamorro Barrios la cita a una cena en un restaurante exclusivo con representantes del IRI ubicados en Managua. Esa cena es para de las continuas reuniones de Chamorro realiza con el IRI donde todo parece indicar que ese organismo es el que le baja la línea para el trabajo de periodismo de oposición que realiza, proyectos que también son financiados por esas agencias.
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