La Comisión de la Verdad, Justicia y Paz mostró su respaldo a la propuesta de la política de Estado para una cultura de paz y reconciliación en Nicaragua, la cual es consultada ampliamente con la población.
Encargada de analizar y esclarecer los hechos ocurridos en la crisis sociopolítica, la junta integrada por Adolfo Jarquín, Cairo Amador, Jaime López y el padre Uriel Molina, dijo que mediante una cultura de paz es posible construir la participación ciudadana.
Ello, según opinaron, fortalece la democracia participativa, rechaza la violencia, abraza el diálogo social y político y el respeto a los derechos humanos.
Según López, los ejes de la cultura de paz constituyen la diversidad, creatividad e institucionalidad del país. Asimismo, indicó que la iniciativa cuenta y presenta retos que sin duda mejorarán las relaciones entre los nicaragüenses como pueblo, familia y sociedad.
En ese sentido, dijo que la misma abre las puertas al diálogo, señala un camino a seguir y presenta metas, al tiempo que admite encuentros y desencuentros.
“Es una línea de acción estratégica para que, con tolerancia y sentido de nación, logremos superar nuestro presente y demos esperanza a nuestro futuro”, puntualizó.
De acuerdo con López, no se trata de un documento completo, sino perfectible que demanda la participación de toda la ciudadanía.
En tanto, el padre Molina sostuvo que la reconciliación es el mecanismo más acertado para superar tantas mentiras y divergencias a las que ha sido sometido el pueblo y las familias, en alusión a la campaña mediática de la derecha que secundó un fallido golpe de Estado.
Para Molina promover una cultura de paz permitirá llegar a un entendimiento mutuo entre todos los nicaragüenses. ‘Todos necesitamos reconciliarnos con la realidad que estamos viviendo’, acotó.
Por otro lado, Jarquín indicó que dicha la política refleja como tal el compromiso del Estado de promover el entendimiento mediante el diálogo y la reconciliación.
“Aquí todos los derechos humanos, están reconocidos y a través de la política de paz estarán siendo promovidos por el Estado”, subrayó.
A su vez, Amador llamó a las familias nicaragüense a acoger esta iniciativa de paz, la cual -enfatizó- generará resultados positivos.
La mencionada propuesta continúa consultándose con la población para que ésta sea discutida en la Asamblea Nacional y promovida a Ley de la República.
De esa manera, una vez aprobada, se podrá aplicar en todos los niveles correspondientes, contribuyendo así a construir paz y al fortalecimiento de un Estado democrático y social de derecho, según las autoridades.
En el documento se plantean líneas de acción estratégicas que buscan salvaguardar la paz, la estabilidad, la no violencia, el bien común y la convivencia pacífica.
Todo ello mediante el uso y práctica de valores, actitudes y conductas inspiradas en los principios de libertad, justicia, democracia, tolerancia, solidaridad y derechos humanos.