Margine Gutiérrez*
Van por más y más porque no se les puede acabar la jodedera. Dejarían de ser útiles al imperio. A los que están sentados en la mesa de negociación y a los politiqueros profesionales les importan poco los presos. Esos importan a su familia. Ellos los ponen como punto número 1 porque creen que el Estado se va a cerrar en ese tema y eso les va a oxigenar su desprestigiado accionar. Sueñan con que sea una bandera que movilice y enardezca al pueblo, pero nada.
La contraparte estatal acepta liberarlos y ellos se quedan sin argumento para hacer sus rabietas. Y eso es grave porque no pueden quedarse sin fundamento para la desestabilización. Les puede pasar las de Guaidó, que ya casi volvió a la nada y los gringos pueden buscar nuevos peones.
Cuando todo lo que pidan como prioridad número uno les sea concedido, van a pedir la Luna. Y recuerden, ellos no han ganado. Todo les está siendo concedido por un gran sentido de responsabilidad ante la nación de parte del Gobierno así como por expresa voluntad política de encauzar el diálogo y la negociación para salvar y desarrollar la patria. Para desmontar sus planes golpistas proimperialistas y alcanzar una paz duradera que impida retroceder a los meses de terror en que nos secuestraron, difamaron, torturaron, mataron y destruyeron el patrimonio cultural y arquitectónico de la nación.
* Tomado de Facebook.