Estados Unidos es una auténtica bestia que se hace cada vez más peligrosa al no recibir la suficiente resistencia su política internacional agresiva. Quienes están callados o hasta favorables ante sus barbaridades hacia países como Venezuela, Cuba o Nicaragua, deben darse cuenta de que mañana las campanas van a doblar por ellos.
Santiago Pérez Benítez, investigador y subdirector del Centro de Investigaciones de Política Internacional de La Habana, afirmó que «se necesita un frente amplio a nivel global para disuadir y detener a esta política de tanta agresividad».
Lo deben formar tanto «los países víctimas de las locuras» de Washington como «los sectores norteamericanos que están opuestos a esta política», indicó el experto, al señalar que el jefe de la Casa Blanca tiene un nivel de aceptación interna de «solamente un 40 por ciento», es decir, «EEUU es mucho más que Donald Trump».
De acuerdo a Santiago Pérez Benítez, «es importante frenar» a EEUU y «crearle costos en su proyección agresiva», porque, si no, se reafirmaría en creerse invencible y haría caer al mundo en una catástrofe, fruto de las «alucinaciones mentales» del presidente estadounidense.
En este contexto, calificó como «vergüenza» el servilismo de organismos como la Organización de Estados Americanos o el Grupo de Lima ante el «curso norteamericano en América Latina», además de repudiar la postura de los países, entre ellos europeos, que reconocieron al autoproclamado presidente venezolano Juan Guaidó, algo que consideró un grave error.
«Lo que debería existir es un rechazo total a estas acciones injerencistas, porque hoy es Venezuela, pero mañana puede ser cualquier otro país que de pronto no le agrade a esta Administración», subrayó Santiago Pérez Benítez.