Los ejércitos de Nicaragua y Honduras firmaron en esta capital un protocolo que estrecha los lazos de cooperación entre ambas instituciones armadas, reseñan hoy medios locales.
El comandante en jefe del Ejército de Nicaragua, general de ejército Julio César Avilés, y el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras, general de división René Orlando Ponce, rubricaron el documento y además pasaron revista a los resultados de la Operación Sandino-Morazán.
De acuerdo con un comunicado de la institución castrense, entre los principales puntos tratados figuró el fortalecimiento de los mecanismos de cooperación existentes entre ambos ejércitos, con el objetivo de enfrentar coordinadamente las amenazas comunes que afectan las zonas fronterizas.
También los procedimientos para ampliar y fortalecer las vías y canales de intercambio oportuno de información e inteligencia a través de los órganos de inteligencia establecidos; y el desarrollo y ejecución de las Operaciones Coordinadas Sandino-Morazán para mantener un clima de tranquilidad y seguridad en la zona limítrofe entre los dos países centroamericanos.
Sobre los resultados de la Operación Sandino-Morazán en lo que va de año, los altos cargos militares destacaron la lucha contra la migración ilegal, el tráfico de drogas en sus diferentes variantes, de dinero, armas, municiones, ganados, maderas, vehículos decomisados, y un narco laboratorio destruido.
Los ejércitos de Nicaragua y Honduras, además de los vínculos de trabajo bilaterales están integrados a la Conferencia de Fuerzas Armadas de Centroamérica, institución creada con el objetivo de contribuir a la seguridad, al desarrollo e integración militar de la región, y a otras funciones en los países centroamericanos.