Marco Oto, de 26 años, falleció hoy en el hospital, luego de haber caído de un puente durante la represión en Quito el pasado lunes. El domingo, un hombre de 35 años perdió la vida al ser atropellado por un vehículo.
Un joven de 26 años murió este martes, luego de haber caído de un puente durante las protestas del pasado lunes en Quito, Ecuador, por lo que ya son dos las personas fallecidas desde que se desataron las manifestaciones contra el ‘paquetazo’ anunciado por el presidente Lenín Moreno, el pasado 2 de octubre.
Oto se precipitó junto a otras dos personas del puente de San Roque, en el casco histórico de la capital ecuatoriana, en medio de la represión policial del pasado lunes contra los manifestantes que rechazan el severo ajuste económico.
Tras pasar horas hospitalizado, la familia del joven confirmó el deceso, al igual que la Policía Nacional, después de una alerta difundida más temprano por organismos de derechos humanos.
La Comisión Ecuménica de los Derechos Humanos (CEDHU) publicó en sus redes una gráfica donde se asevera que Oto vivía en el sector San Roque, que había ido a visitar a su madre en el mercado donde trabajaba y que falleció en un «confuso accidente» con la Policía.
La segunda víctima fatal fue identificada como Raúl Chilpe, quien murió al ser atropellado por un vehículo en la provincia andina de Azuay, en momentos en que participaba de una protesta pacífica.
«Se encontró a un hombre de 35 años sin signos vitales, víctima de un atropello por un vehículo, que aparentemente huía del lugar al ser agredido por comuneros que mantienen bloqueada la vía pública», informó la Comisión de Tránsito de Ecuador (CTE) en una nota.
En tanto, agentes de la Oficina de Investigación de Accidentes de Tránsito (OIAT) realizaron un operativo para localizar al vehículo involucrado en el hecho, ya que el conductor escapó del lugar.
Represión, exceso policial y tratos crueles
Un informe publicado por la Defensoría del Pueblo este martes arrojó que, en medio del estado de excepción decretado por el presidente ecuatoriano, hasta ahora hay 485 personas detenidas entre el 3 y 4 de octubre como parte «del incremento sistemático del espiral de violencia, así como del uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas».
En el documento se hace referencia a «tratos crueles, inhumanos y degradantes y hasta actos de tortura» ocasionados durante las detenciones.