Los principales medios de comunicación de EE.UU. han estado trabajando codo a codo con el Gobierno para organizar una guerra propagandística, y se aprecia especialmente bien en la cobertura de la situación en Ucrania, opina el analista geopolítico William Jones, quien considera que en EE.UU. no existe el periodismo libre.
«El periodismo libre en EE.UU. en realidad no existe», declaró a RT Jones, del semanario ‘Executive Intelligence Review’ en Washington.
«Hay muy pocos buscadores de la verdad en el periodismo, y los que hay habitualmente entran en conflicto con sus propios medios, especialmente si estos reciben fondos del Gobierno, y son relegados a un segundo plano o bien echados del negocio por completo», explicó.
En opinión de Jones, «los principales medios de comunicación han estado trabajando codo a codo con el Gobierno de EE.UU. para llevar a cabo una guerra de propaganda, y lo vemos sobre todo en la situación con Ucrania».
Para hacer que la gente crea «grandes mentiras» hay que gastar grandes sumas de dinero. Por ejemplo, «todo el mundo sabe que el Estado Islámico es un grupo peligroso, pero no todo el mundo cree que Vladímir Putin sea un mal tipo».
Por tanto, prosigue el analista, «para tratar de convencer a la gente de que esto es así, hace falta gastar mucho más dinero (…) que para convencer a la gente de que el Estado Islámico es una mala organización y tiene que ser combatida».
Por ello «tienen que destinar estas enormes cantidades de dinero, especialmente en materia de difusión», como es el caso de Letonia, adonde, según el experto, «están tratando de enviar ahora una emisión en ruso».
Les asusta mucho que la gente no «se trague» «la gran mentira sobre lo que está sucediendo en Ucrania y en otros lugares y la situación en Rusia», por lo que gastan una gran cantidad de fondos con el fin de tratar de llevar el mensaje.
«Pero creo que en última instancia, la verdad prevalecerá», opina Jones, que añade que «la gente en general no es tan crédula como las personas de autoridad a veces piensan».
«Y creo que esta campaña de propaganda en última instancia será un fracaso, pero van a hacer todo lo posible para tratar de llevar su historia, así como su narrativa, al público general», aseveró el experto.
A su juicio, lo que interesa a los medios estadounidenses no es «la información», sino la imposición de su «línea política». Las emisiones gubernamentales y Voice of America, Al Hurra, Radio Free Europe, van a ser utilizados «en una campaña muy intensiva» para tratar de crear «una historia».
Esta política «no es nada nueva», considera el analista, recordando que es «lo que hizo Goebbels en la Alemania nazi».
«No están interesados en la verdad, si estuvieran interesados en la verdad, no estarían haciendo las cosas que están haciendo para tratar de fomentar virtualmente una guerra en Ucrania», concluye Jones.