El “estratega” político Juan José Rendón, empleado del títere del gobierno gringo, Juan Guaidó, es un avezado delincuente de cuello blanco que ha sido señalado de interferir en procesos electorales en América Latina, entre ellos Nicaragua en 2011.
Rendón, un protegido de las autoridades norteamericanas, confesó en entrevista a la CNN que pagó 50 mil dólares al mercenario gringo Jordan Goudreau, propietario de la organización criminal transnacional Silvercorp USA, a fin de que invadiera Venezuela con el propósito de secuestrar o matar al presidente Nicolás Maduro y otros funcionarios de su gobierno.
Juan José Rendón, de nacionalidad venezolana, en años anteriores ha subcontratado a hackers a fin de espiar y posteriormente influir a favor de sus empleadores derechistas, en los procesos electorales de Nicaragua, Panamá, Colombia, México y Venezuela, entre otros.
Sus actividades fueron develadas por el hacker colombiano Andrés Sepúlveda, contratado por políticos de derecha latinoamericanos junto a Rendón, a fin de influir en los resultados de las elecciones en los países antes mencionados.
En el caso de Nicaragua, Sepúlveda, condenado a 10 años de prisión en su país por espionaje, confesó que durante el proceso electoral de 2011 atacó al comandante Daniel Ortega, quien se había postulado como candidato, a través de la intercepción de la cuenta de correo electrónico de la actual vicepresidenta Rosario Murillo.
Sepúlveda reveló a la revista norteamericana Bloomberg Businessweek que cumplió estas labores durante ocho años en América Latina bajo órdenes de Juan José Rendón y otros socios, quienes pese a sus delitos, continúan operando impunemente, como lo demuestra el involucramiento en la reciente y fallida incursión armada en el país bolivariano, del delincuente y “estratega” político venezolano.
Rendón y Sepúlveda infiltraron el sitio web de un rival de Álvaro Uribe, en Colombia, robaron una base de dato de correos electrónicos y enviaron correos masivos a los usuarios con información falsa.
Sus actividades en Venezuela incluyeron el saboteo de la campaña presidencial de 2012, en la que Hugo Chávez resultó electo; el hackeo del correo electrónico del político del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) Diosdado Cabello y la cuenta en Twiiter de Nicolás Maduro, actual mandatario venezolano.
En Honduras, ayudó al candidato presidencial Porfirio Lobo Sosa, electo presidente en 2009, mientras que en Guatemala, interceptó digitalmente datos de seis personajes del ámbito de la política y los negocios para entregárselos a Juan José Rendón, quien se embolsó millonarias sumas de dinero en dólares con la ejecución de estos delitos.
En 2014, la Fiscalía General colombiana investigó a Rendón en torno a una acusación que lo vinculaba a capos del narcotráfico que le habrían pagado 12 millones de dólares para propiciar un acercamiento entre bandas criminales y el sector judicial de Colombia.
Una comisión de fiscales viajaría a Nueva York para interrogar al capo Javier Antonio Calle Serna alias «Comba», quien declaró que él y otros narcos pagaron 12 millones de dólares a Rendón para que sirviera de puente entre ellos y el Gobierno nacional para una propuesta de negociación.
Los otros narcos eran Diego Rastrojo, Cuchillo y Daniel El Loco Barrera, según la información publicada por El Espectador, que Comba le detalló a una fiscal de Extinción de Dominio.
Se comprobó que Rendón sostuvo una reunión con la entonces fiscal general, Viviane Morales y otros representantes de la justicia colombiana, para tratar el tema del sometimiento a la justicia de bandas criminales.