Según las autoridades colombianas, la recién juramentada Asamblea Nacional (AN) está integrada por miembros «fraudulentamente electos».
El Gobierno de Colombia reiteró este martes que no reconoce «legitimidad ni legalidad» de los comicios legislativos celebrados el pasado 6 de diciembre en Venezuela y, por ende, desconoce la legitimidad de la nueva Asamblea Nacional (AN) que se instaló este martes, de mayoría chavista.
Según las autoridades colombianas, de acuerdo con un comunicado de la Cancillería, el nuevo Parlamento está integrado por miembros «fraudulentamente electos».
Desde Colombia mantienen el reconocimiento al Parlamento instalado en 2016, tras los comicios de 2015, cuyas funciones culminaron, legalmente, este martes.
Con esta maniobra de extender el reconocimiento a un Parlamento caduco, Colombia le da un espaldarazo a Juan Guaidó, exdiputado opositor y titular del viejo Parlamento, quien trató de prorrogar la «continuidad administrativa» de la Asamblea Nacional mediante un decreto, anulado después por el Tribunal Supremo de Justicia venezolano.
«Los aliados de Narnia»
En respuesta a este comunicado de Colombia, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, dijo: «Estos gobiernos no se cansan de hacer el ridículo, ni siquiera cuando su plan de intervención es derrotado por completo».
«Se creen autoridad electoral, refieren normas constitucionales inexistentes, ignoran el Derecho Internacional», añadió en su cuenta de Twitter. Asimismo, lamentó que «los aliados de Narnia (en referencia al inexistente gobierno de Guaidó) no asumen su derrota».
Arreaza le pide al canciller de Brasil que abandone el «terraplanismo»
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, rechazó este martes que su homólogo brasilero, Ernesto Araújo, «mienta» al firmar que la supuesta extensión del mandato del opositor Juan Guaidó «está respaldada por la Constitución y la Corte Suprema» del país.
«¿Cuál es el artículo de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en el que basa esta declaración ilegal?», le preguntó Arreaza a Araújo, al tiempo que lo instó a «actuar como canciller» y abandonar el «terraplanismo».
Más temprano, Araújo reiteró el reconocimiento del gobierno brasileño a la Asamblea Nacional (AN) elegida en el año 2015 y rechazó la instalación del nuevo Parlamento, por considerar que los comicios legislativos del pasado 6 de diciembre fueron «una farsa electoral».
Para el canciller brasilero, los parlamentarios de la AN electa para el periodo 2016-2021 decidieron extender sus mandatos de manera unilateral, ante la supuesta «falta de respeto del gobierno de Maduro a las leyes electorales». Asimismo, afirmó que el gobierno de Bolsonaro «seguirá trabajando con la legislatura actual y con Guaidó como presidente en ejercicio».
Con esta maniobra de extender el reconocimiento a un Parlamento caduco, Brasil al igual que EE.UU. y varios miembros del llamado Grupo de Lima, le da un espaldarazo a Guaidó, exdiputado opositor y titular del viejo Parlamento, quien trató de prorrogar la «continuidad administrativa» de la AN mediante un decreto que posteriormente fue anulado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela.
Esta martes, Venezuela inició una nueva etapa política tras la juramentación de los 277 diputados electos el pasado 6 de diciembre, con Jorge Rodríguez como nuevo presidente del Parlamento.