Vaya confesión la de doña Ivett Blandón. “Ayer redacté una carta para la congresista Ileana Ros-Lehtinen”. ¿No es que esta señora trabaja con el “Rescate al Sandinismo”? El odio al FSLN es tan irracional, que esta gente es capaz de pactar hasta con el mismísimo diablo.
Sí, con el diablo, y uno de la legión es precisamente el estafador Gerardo Sánchez, con quien Blandón hizo buenas migas sin importarle que se le presentara como el potencial asesino de mucha gente que ella conoció en el Frente Sandinista.
Y este ente del mal la convenció en un dos por tres, al extremo de que Blandón, alias “Sol de libertad”, escribió a Ros-Lehtinen, una ultraderechista republicana representante del exilio cubano anticomunista en Estados Unidos.
Se entendieron tan bien, que hasta terminaron coqueteando.
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