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* El miembro del consejo principal de la administración militar-civil de la región, Vladímir Rógov, denunció que los soldados de Kiev lanzan ataques contra el sistema de refrigeración, a sabiendas de que estas ofensivas puedan desatar procesos descontrolados.
Militares ucranianos lanzan ataques contra puntos débiles de la central nuclear de Zaporozhie, incluido el sistema de enfriamiento, lo que podría causar «una catástrofe peor que la de Chernóbil» en 1986, denunció este martes el miembro del consejo principal de la administración militar-civil de la región homónima, Vladímir Rógov.
«El reactor (de la central)” necesita constantemente refrigeración […], varias decenas de disparos de armas pesadas fueron efectuados [por Ucrania] precisamente en el circuito de refrigeración.
No está tan protegido como el propio reactor, por supuesto y, en principio, es posible que nuestros enemigos interrumpan su funcionamiento, quiebren su integridad e impidan la refrigeración de calidad del reactor», declaró el representante local en una entrevista al canal Soloviev Live.
En este sentido, el funcionario denunció que las Fuerzas Armadas de Ucrania lanzan ataques deliberados contra el sistema de refrigeración, conscientes de que estas ofensivas puedan desatar procesos descontrolados.
Asimismo, Rógov denunció que los soldados de Kiev también bombardean los contenedores con residuos de combustible nuclear, lo que podría traer consigo contaminación radiactiva, en el caso de que los proyectiles impactaran contra dichas instalaciones.
De hecho, mencionó que uno de los proyectiles guiados cayó a unos 10 metros de los depósitos con desechos, mientras que otros cayeron a unos 50 y 200 metros.
Capacidad de proteger el reactor
En cuanto a los reactores de la central, el representante indicó que están protegidos de forma muy segura. «El margen de seguridad del reactor es tan grande, que incluso si un avión con los depósitos llenos cayera sobre él desde una altura de 10 kilómetros, el reactor debería [permanecer] intacto. Para destruir el reactor, hay que utilizar armas nucleares tácticas», explicó.
Asimismo, aseguró que, en teoría, es posible suspender la central, aunque desde el punto de vista económico no sería conveniente porque resultaría muy costoso. Por otra parte, no se podría efectuar la evacuación de los residuos de combustible nuclear, aclaró.
• La situación en la central nuclear se viene agravando desde el pasado viernes. 5 de agosto, cuando las autoridades de la ciudad de Energodar denunciaron varios ataques contra la planta, que atribuyeron a las fuerzas ucranianas.
• El director de la OIEA, Rafael Grossi, declaró un día después que la institución estaba «extremadamente preocupada» por las acciones cerca de la central y advirtió que el riesgo de una posible catástrofe nuclear es «muy real». No obstante, las fuerzas ucranianas volvieron a lanzar el pasado jueves varios ataques contra la planta nuclear.
• Ante ello, Rusia solicitó convocar una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la situación, en la que Grossi propuso desplegar una misión de expertos para inspeccionar la instalación. Además, instó a las autoridades rusas y ucranianas a cooperar para que los expertos de la organización tengan acceso a la central.
• El pasado domingo, la Unión Europea instó a Rusia a retirar inmediatamente sus fuerzas militares de la central y de toda Ucrania, al tiempo que acusó a Moscú de impedir que «se cumpla la seguridad nuclear y radiológica» en la planta. Por su parte, desde la Cancillería rusa desmintieron las alegaciones de Bruselas y reiteraron que los ataques contra la planta nuclear los llevan a cabo formaciones ucranianas «bajo órdenes de Kiev».