En la cita se definirá quién será el próximo presidente pro-témpore del mecanismo de integración.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, inauguró la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se celebra este martes en Buenos Aires.
«La oportunidad de unir a la región es un imperativo que se nos impone sobre nosotros […] Solos valemos poco y unidos podemos tener una fuerza arrolladora«, destacó el mandatario argentino en su discurso inaugural.
El mandatario ofreció un balance de la presidencia pro-témpore de Argentina en el organismo regional.
«Me ocupé en este tiempo de reclamar por el respeto a todas nuestras naciones» en diferentes instancias internacionales, señaló.
Entre otros asuntos, indicó que abogó por el «fin de los bloqueos que países latinoamericanos aún padecen», como Cuba y Venezuela, ante la Cumbre de las Américas, que se celebró en junio del año pasado en Los Ángeles, EE.UU.
«Los bloqueos son métodos muy perversos de sanción, no a los gobiernos sino a los pueblos, y por lo tanto no podemos seguir permitiéndolos. Cuba lleva un bloqueo de más de seis décadas y eso es imperdonable, Venezuela padece otro tanto y nosotros tenemos que levantar nuestra voz», mencionó Fernández.
También destacó el trabajo que hizo junto a Colombia, México y Francia para «llamar otra vez al diálogo en Venezuela».
Fernández señaló que otra de las gestiones ante instancias internacionales fue llevar su preocupación por las afectaciones del cambio climático a la región del Caribe. «Creo que hemos llamado la atención del mundo en ese aspecto», indicó.
Democracia en riesgo
Fernández, en su discurso, señaló que la democracia está definitivamente en riesgo en la región.
«Después de la pandemia hemos visto como los sectores de ultraderecha se han puesto de pie y están amenazando a cada uno de nuestros pueblos», enfatizó el mandatario argentino.
Al respecto, recordó el golpe de Estado contra Evo Morales en Bolivia en 2019; el reciente ataque a las sedes de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de Brasil a principios de enero; y el ataque en contra de la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández.
Por ello, instó a sus pares presentes en la cumbre a «trabajar para garantizar y fortalecer la institucionalidad» en la región.
Continente más desigual
Fernández reiteró, como ha dicho en otros foros, que «vivimos en el continente más desigual del mundo».
Por ello, invitó a sus pares a «encarar un proceso» que los lleve hacia la igualdad y hacia la justicia social en las naciones del continente.
Una vez más, señaló que para eso tienen que trabajar unidos, porque, dijo, «es mucho más fácil lograr esos resultados trabajando juntos en un mundo donde la globalización existe, que ir haciéndolo separados».
Además de Fernández, otros mandatarios que asisten al encuentro son Miguel Díaz-Canel (Cuba); Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil); Gabriel Boric (Chile); Luis Arce (Bolivia); Gustavo Petro (Colombia); Xiomara Castro (Honduras); Luis Lacalle Pou (Uruguay) o Mario Abdo (Paraguay).
El mandatario de Venezuela, Nicolás Maduro, tenía previsto asistir, pero en último momento canceló el viaje tras conocerse un plan de agresión contra la delegación presidencial