El Cártel de los Soles es una mentira como la de las armas de destrucción masiva de Irak

 

* Según el presidente Gustavo Petro, de Colombia, no es el Cártel de los Soles, son capos albaneses e italianos, que son parte de la Junta del Narcotráfico, los que manejan las drogas en su país y Venezuela. Lo demás son infundios para justificar una invasión.

El mandatario Gustavo Petro, salió al paso a las acusaciones infundadas de la senadora colombiana María Fernanda Cabal, quien a través de su cuenta en X criticaba declaraciones del ministro del Interior colombiano, Gustavo Benedetti y del presidente Nicolás Maduro, respecto a la cooperación de ambas naciones contra el narcotráfico.

«No señora. Quien maneja el tráfico de cocaína por Venezuela no es el cartel de los soles, esa es una mentira como las armas de destrucción masiva de Irak, y solo sirve para invadir países. Quien maneja el tráfico de cocaína por Venezuela son los mismos que manejan el tráfico de cocaína del Catatumbo, los llanos y la Sabana de Bogotá, se llaman la Junta del Narcotráfico y el gobierno de los EEUU y las inteligencias de Europa tienen desde hace tiempo la información», aseveró Petro en parte de su publicación en redes sociales.

Petro aseguró que las autoridades de Colombia, Ecuador y Venezuela, han logrado capturar grandes capos albaneses e italianos «que son parte de la junta mundial del narcotráfico, que privilegia Europa en su destino y destruye el gobierno de Haití».

Así mismo, recordó a la funcionaria la consecuencia de una invasión a Venezuela. «La consecuencia, señora senadora, de estimular una invasión a Venezuela, traerá como consecuencia, millones en la migración a Colombia y la caída del precio del petróleo a menos de 50 dólares, y quebrará, por tanto, a Ecopetrol, mientras los extractores de petróleos livianos árabes norteamericanos y rusos, se quedarán con el mercado», puntualizó.

Esta semana, el presidente Petro ha lanzado severas advertencias sobre lo que podría originar una intervención militar de EE.UU. en Venezuela, afirmando que sería «el peor error», con consecuencias en toda la región latinoamericana.