A más bajas por la guerra, ¿más conflictividad?

Ucrania, en su confrontación con Rusia, ha empleado drones para bombardear objetivos civiles 

El apoyo armamentístico de Occidente a las fuerzas ucranianas crece a la par que aumentan las bajas en la confrontación con Rusia. Números revelados por fuentes militares dan cuenta de que suman 26 000 los fallecidos del lado ucraniano en el teatro de operaciones. 

Sin embargo, nada parece disuadir el estado de beligerancia, y la insistencia es a prolongar el conflicto, como lo demuestra el reciente empleo de drones para bombardear objetivos civiles rusos, fundamentalmente en Crimea y en las cercanías de Moscú. 

El pasado lunes, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que dos drones ucranianos fueron abatidos sobre la capital rusa mediante sistemas de guerra electrónica, sin causar víctimas. También fue repelido un ataque de 17 de estos vehículos en Crimea, tres de los cuales cayeron en la citada península, y los 14 restantes fueron derribados o neutralizados, la mayoría sobre el Mar Negro, según un despacho de Sputnik. 

La vocera de la Cancillería rusa, María Zajárova, calificó los hechos como «un acto de terrorismo internacional», en tanto el jefe del Comité de Defensa del Consejo de la Federación de Rusia, Víctor Bondarev, aseguró que «las tropas de guerra electrónica de su país mantienen adecuadamente la defensa, no solo en la zona de la operación militar especial, sino también en todo el territorio ruso». 

El vicepresidente del Consejo de Seguridad, Dmitri Medvedev, advirtió que las fuerzas ucranianas eligen cada vez más objetivos civiles para sus ataques, y llamó a los rusos a «estar preparados» ante tales acontecimientos. 

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