El delincuente cumple cadena perpetua desde 1981 por otros homicidios. De momento, las autoridades lo han relacionado con once casos aunque el hombre afirma haber cometido hasta 100 asesinatos.
Richard Cottingham, un asesino en serie, procedente del estado de Nueva Jersey (EE.UU.), se declaró culpable este martes durante una audiencia judicial virtual de raptar, violar y matar a dos menores de edad hace casi cinco décadas.
Las víctimas fueron Mary Ann Pryor y Lorraine Marie Kelly, de 17 y 16 años, respectivamente. Antes de su desaparición, el 9 de agosto de 1974, las adolescentes planeaban dirigirse a un centro comercial para adquirir trajes de baño.
El recluso confesó que llevó a las menores a la habitación de un motel, donde fueron atadas y violadas. Luego, el delincuente ahogó a las jóvenes en la bañera. Sus cadáveres desnudos y maltratados fueron hallados boca abajo en un bosque cinco días después de su desaparición.
Una larga historia de crímenes atroces
Cottingham fue sentenciado a cadena perpetua en 1981 por otros homicidios. En total, el criminal afirma haber cometido hasta 100 asesinatos, pero, de momento, las autoridades lo han relacionado con once casos, incluyendo el doble homicidio de 1974. No obstante, se presume que la cantidad de las víctimas fatales a manos del preso es mayor.
El delincuente es conocido también como ‘Torso killer’ (Asesino del torso, en español), ya que solía desmembrar a sus víctimas, cortándoles las extremidades y la cabeza.
Tras admitir la culpabilidad respecto al caso de Mary y Lorraine, se espera que Cottingham reciba dos cadenas perpetuas más en julio en adición a las penas que ya está cumpliendo.