El presidente se comprometió a encabezar un proceso electoral ejemplar rumbo a la Convención Constituyente
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, celebró hoy la jornada democrática que culminó con la aprobación para que se redacte una nueva Constitución nacional que sustituirá a la que regía desde 1980.
«La mayoría del pueblo ha elegido la opción de una Convención Constituyente que por primera vez tendrá plena igualdad entre hombres y mujeres. Hemos demostrado madurez, cada voto ha tenido el mismo valor, ha triunfado la democracia», dijo después de que se conocieran los resultados oficiales del plebiscito realizado este domingo.
Cuando habló el mandatario, el Servicio Electoral ya había revelado que, con el 45 % de las mesas escrutadas, el «Apruebo» una nueva Constitución ganaba con el 77.85% de los votos.
Acompañado de su gabinete, Piñera consideró que estos comicios demostraron que prevaleció la unidad de los chilenos sobre la violencia, lo que representa un triunfo que debe alegrar al este país porque la esperanza es más inspiradora que el miedo
«Este plebiscito no es el fin, es el comienzo de un camino que todos deberemos recorrer para acordar una nueva Constitución para Chile. A partir de ahora todo debemos colaborar para que esa nueva Constitución sea un marco de estabilidad y futuro», advirtió.
También recordó que, con miras a este proceso, su gobierno asumió compromisos claros, y el primero de ellos era desarrollar un plebiscito transparente que garantizara el respeto a la voluntad del pueblo chileno.
Retos
Por otra parte, Piñera agregó que también tenía la misión de cuidar la salud de la población en medio de la pandemia de coronavirus, lo que se logró al aplicar todas las normas sanitarias necesarias en los centros de votación
El presidente consideró que es importante impulsar una Constitución que recoja valores, principios y la tradición democrática y republicana de Chile, con base en el respeto a las aspiraciones de todos los ciudadanos, y que organice a los poderes del Estado con el fin de proteger de abusos a la población y evite la discriminación.
«Nuestro gobierno siempre estará del lado de la libertad, la paz, la democracia y los derechos humanos», señaló a pesar de los informes nacionales e internacionales que denuncian la permanente violencia institucional y abusos de derechos humanos cometidos por las fuerzas de Seguridad.
En ese sentido, se refirió el estallido social que comenzó en octubre del año pasado, cuando un grupo de jóvenes se rebeló al alza del boleto del metro y desató una larga, masiva e inédita movilización ciudadana que sorprendió en Chile y en el resto del mundo porque demostró la inconformidad que había en torno al modelo político, económico y social de este país y que hasta entonces no se había visibilizado
Piñera recordó que el 12 de noviembre de 2019, después de una noche de extrema violencia en el país, propuso un triple acuerdo por la paz, la justicia y una nueva Constitución, y que tres días más tarde el Parlamento aprobó la convocatoria al plebiscito que, finalmente, se realizó este domingo.
«Alcanzamos un acuerdo que nos ha permitido recorrer la vía del diálogo y los acuerdos, como nación recorrimos un camino democrático y pacífico para encauzar a nuestro país«, reiteró.
Al anticipar el proceso que se inicia después de esta votación, el presidente advirtió que «una Constitución nunca nace de cero» y que en el caso de Chile deberá recoger «la herencia de las generaciones que nos antecedieron, la voluntad de las generaciones presentes y la esperanza de las generaciones futuras».
A sabiendas de la permanente tensión entre los Carabineros, que siempre terminan con denuncias por represión, y los manifestantes, Piñera convocó a la ciudadanía a volver pacíficamente a sus hogares.
En ese mismo momento, la Plaza Italia, rebautizada por los activistas como Plaza Dignidad, rebosaba de activistas que celebraban el triunfo del «Apruebo» a una nueva Constitución.
En ese contexto, el historiador y profesor de la Universidad de Chile, Sergio Grez Toso, afirmó que la victoria del «Apruebo» en la votación «significa el inicio de un proceso» largo para «transformar el régimen político y la sociedad chilena»