El desconcierto y la incertidumbre reina en las más altas estructuras del gobierno de Colombia ante la inminente victoria de Nicaragua en el tribunal de la Haya, cuyo fallo se conocerá el próximo jueves, 17 de marzo.
La canciller de Colombia, María Ángela Holguín, se ha quedado sin argumentos para explicar al pueblo de Colombia el verdadero alcance de lo que significará el nuevo revés que sufrirá ese país y únicamente se refiere, pero de una manera vaga y general, al procedimiento técnico sobre las excepciones preliminares que se han seguido en esa nueva disputa jurídica.
Según Holguín, lo que se dirá por parte de dicho tribunal “no es una decisión de fondo, es una decisión completamente de forma donde la Corte va a decir si es competente o no para revisar el asunto”.
La canciller explicó que se han presentado excepciones preliminares con argumentos sólidos que indicarían que la Corte no tiene competencia para tomar decisiones de fondo sobre las demandas interpuestas por Nicaragua, debido a que Colombia se retiró del pacto de Bogotá.
“Nos hemos preparado desde el momento mismo en que Nicaragua puso estas demandas en septiembre y noviembre del año 2013. Son dos demandas, una sobre el incumplimiento del fallo y la segunda sobre plataforma continental extendida”, especificó.
Holguín, aunque no hizo exactamente referencia a los comentarios del senador y expresidente Álvaro Uribe, un político extremadamente demagogo e inmoral , sobre que el Gobierno debería anticiparse al fallo y decir que no aceptará lo dicho por este tribunal, sí pareció responderle al plantear que se está argumentando, pero respetando los organismos internacionales.
“Hemos dicho que la Corte no es competente de la manera como se relacionan los países con cualquier organismo de Naciones Unidas, de donde el gobierno es parte. Hemos dicho que nos hemos retirado del pacto de Bogotá y por lo tanto no debería tener ya la competencia para seguir viendo los asuntos, pero lo que estamos diciendo como un país respetuoso del derecho internacional y respetuoso de nuestros organismos internacionales”, aseguró.
Esos son los argumentos oficiales del gobierno de Colombia, unos argumentos pobres, sin contenido jurídico ni diplomático, al parecer orientados a engañar a la opinión pública de ese país, para tratar de suavizar el nuevo revés que se aproxima en la semana entrante.
Por su parte, el presidente de la Comisión Segunda del senado de Colombia, Carlos Fernando Galán, en una entrevista que brindó a El Nuevo Siglo de Colombia, obviamente expresó su respaldo a la posición de Colombia frente al litigio que tiene con Nicaragua por la plataforma continental en el Caribe, pero brindó mayores detalles sobre lo que significa la nueva demanda del gobierno de Managua.
Para el senador Carlos Fernando Galán la posición de Colombia ha sido la adecuada. Señaló que además se debe tener en cuenta las posiciones que han adoptado los gobiernos sobre el proceso jurídico internacional.
En cuanto a la inminente derrota de Colombia, el senador Galán que “hay que evaluar, y habrá que mirar en ese momento y esperamos tener una reunión pronta con la Cancillería para tener claros los caminos que están contemplados en los diferentes escenarios que pueden surgir el 17 de marzo. Que uno, el menos deseable, es ese. Hay que evaluar y es importante una reunión para tener el mapa completo.
“Si la Corte se declara competente, vendrán procesos y vendrán posiciones ante la Corte que es mejor no adelantarse a eso. Esperemos que Colombia haya defendido muy bien la tesis por la cual se considera que la Corte no es competente para asumir el estudio de estos dos casos y tomen una determinación frente a eso”, dijo.