Biden instó el miércoles a Netanyahu a buscar una «desescalada significativa» en el camino hacia un alto el fuego, a la vez que la misión de EE.UU. ante la ONU señaló que no apoyará el proyecto de resolución propuesto por Francia, que contiene un llamamiento similar.
Las confrontaciones entre Israel y la Franja de Gaza continuaron a lo largo del miércoles y en las primeras horas del jueves, cuando aviones de combate israelíes realizaron nuevos ataques aéreos y los palestinos siguieron lanzando cohetes.
Después de la medianoche, Israel llevó a cabo más de una docena de ataques aéreos en Gaza, incluidos dos que destruyeron dos casas en el sur del enclave. Según médicos, cuatro personas resultaron heridas en un ataque aéreo en la ciudad de Jan Yunis, en el sur de Gaza, recoge Reuters.
Además, en las últimas 24 horas aviones israelíes atacaron los complejos de defensa aérea y «una gran cantidad de lanzacohetes de varios barriles» de Hamás, así como una «unidad de almacenamiento de armas» ubicada en el hogar de un funcionario de la organización y una «infraestructura militar ubicada en las residencias» de otros comandantes de Hamás».
Por otra parte, las sirenas anticohetes sonaron en la madrugada del jueves en la ciudad israelí de Beersheba y en las áreas fronterizas con Gaza. No hubo informes inmediatos de víctimas o daños. Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), un total de 4.000 cohetes fueron lanzados desde Gaza hacia su territorio en los últimos 10 días.
Entre tanto, Hamás anunció que lanzó también varios cohetes en dirección a la base aérea israelí de Hatzerim, recoge el canal Al Mayadeen.
Los llamamientos para el cese de hostilidades entre Israel y la Franja de Gaza se han hecho más fuertes en los últimos días.
Un alto funcionario político de Hamás, Moussa Abu Marzouk, expresó este miércoles la esperanza de que las dos partes alcancen un alto el fuego «dentro de uno o dos días». «Creo que los esfuerzos en curso con respecto al alto el fuego tendrán éxito. […] Espero que se alcance un alto el fuego dentro de uno o dos días, y el alto el fuego se basará en un acuerdo mutuo», dijo.
Por su parte, el presidente de EE.UU., Joe Biden, instó el miércoles al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a buscar una «desescalada significativa» en el camino hacia un alto el fuego, según informó la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
Al mismo tiempo, la misión estadounidense ante la ONU señaló que no apoyará un proyecto de resolución de Francia que pide un alto el fuego entre Israel y la Franja de Gaza, diciendo que tal acción «socavaría los esfuerzos para desescalar» la violencia. Previamente, la Administración Biden bloqueó en tres ocasiones en una semana declaraciones conjuntas con llamamientos similares.
Desde el inicio de las confrontaciones el 10 de mayo, los ataques israelíes han dañado al menos 18 hospitales y clínicas y destruido un centro de salud en la Franja de Gaza, mientras que casi la mitad de los medicamentos esenciales en el territorio se han agotado.
Como resultado de los bombardeos fallecieron al menos 227 palestinos, incluidos 64 niños, y más de 1.600 resultaron heridos. Entre los israelíes murieron 12 personas, incluidos dos niños, y decenas sufrieron lesiones.