Tras rechazar una mediación de Rusia, el gobierno de Netanyahu aprobó un plan para intensificar los ataques sobre las milicias palestinas en la Franja de Gaza.
Israel y las milicias palestinas no mostraron hoy ninguna contención, pese a la muerte de civiles y las llamadas internacionales, e intensificaron durante este tercer día los ataques que encaminan este nuevo enfrentamiento a una cuarta guerra.Las anteriores ocurrieron 2008, 2012 y 2014, esta última la más sangrienta, con más de 2.200 víctimas fatales palestinas y 73 israelíes. Miles resultaron heridos.
Los cohetes desde el enclave de Gaza -más de un millar, la mayoría interceptados o fallidos- mataron este miércoles, según el servicio de emergencias israelí United Hatzalá, a un niño de seis años, elevando a siete las víctimas en Israel. En Gaza, 65 palestinos han muerto desde el lunes, entre ellos 16 niños.
Según el digital Ynet, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, habría confirmado hoy al gabinete de seguridad que rechazó una propuesta de Rusia para alcanzar un alto el fuego. Además, el mismo medio informó de que el gabinete aprobó este miércoles un plan para intensificar los ataques sobre las milicias palestinas en el enclave.
Por otra parte, el movimiento islamista Hamas, que gobierna en Gaza, aseguró que no aceptará una tregua hasta que paren los bombardeos. Hamas también insistió en sus demandas de parar «la represión en Jerusalén».
La escalada actual se disparó tras la noticia del eventual desalojo de familias palestinas para dejar sus viviendas a colonos judíos en el barrio de Sheij Jarrah, en el territorio ocupado de Cisjordania. La parte palestina de la Ciudad santa, ocupada por Israel, ha sufrido en estos últimos días la violencia más dura desde 2017 alrededor de la Mezquita Al Aqsa, tercer lugar más sagrado del Islam.
También contuinuaron los choques y la represión policial de palestinos dentro del territorio israelí. Netanyahu, declaró un estado de emergencia en la localidad de Lod, población mixta judía y musulmana, a unos 15 kilómetros de Tel Aviv tras una serie de ataques, choques y disturbios registrados en la noche del lunes para el martes. El presidente israelí, Reuven Rivlin condenó los graves disturbios en Lod y otras ciudades de mayoría palestina y acusó de ellos a una «multitud árabe sedienta de sangre».
Misil y amenazas
El brazo armado de Hamas disparó este miércoles un misil antitanque -el segundo después del lanzado por la Yihad Islámica el lunes- contra un vehículo blindado militar ymató a un soldado israelí de 21 años. De madrugada, las milicias lanzaron una nueva ráfaga que hizo sonar las alarmas en el área de Tel Aviv y que mató a un hombre y su hija de 16 años, árabes israelíes, en la ciudad de Lod.
Durante el día, 15 proyectiles fueron disparados hacia la ciudad israelí de Dimona, donde se ubica una planta nuclear, mientras subía la retórica de la guerra con amenazas y plazos de nuevos ataques. Por la tarde, las milicias lanzaron 130 cohetes más contra las ciudades israelíes de Netivot, Sderot y Ashkelón, esta última especialmente castigada en la jornada de ayer.
El número dos de Hamas, Salah al Arouri, dijo este miércoles en una entrevista con el canal de televisión Al Aqsa TV que los cohetes y misiles disparados en los últimos días son «existencias viejas» de las cuales querían deshacerse y que aún no han disparado el arsenal más nuevo.
Bombardeos en Gaza
Los bombardeos israelíes en el bloqueado y superpoblado enclave palestino fueron especialmente intensos durante cuatro horas esta mañana en la ciudad de Gaza y continuaron intermitentemente durante el día, causando la muerte de tres menores.
Además, una cuarta torre de 14 plantas, Al Shuruq, se derrumbó hoy tras ser bombardeada, después de haber recibido una orden de evacuación. En total, 500 edificios residenciales y 52 instalaciones gubernamentales, principalmente estaciones de policía y asociaciones de Hamás, han sido bombardeados en esta escalada.
El Ejército israelí llevó a cabo una operación junto a los servicios de inteligencia contra «el mando militar supremo» de las Brigadas al Qasam, el brazo armado de Hamás. El operativo consistió en matar simultáneamente a 10 comandantes militares, incuyendo el comandante de la ciudad de Gaza, Bassem Issa.
Según el portavoz militar israelí Jonathan Conricus, desde el lunes al menos 25 milicianos «de diversos rangos y antigüedad, pertenecientes a Hamás y la Yihad Islámica» han muerto en ataques selectivos.
Sin tregua
«Estamos avanzando hacia una guerra a gran escala. Los líderes de todos los bandos tienen que asumir la responsabilidad de una desescalada», pidió este miércoles el enviado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Oriente Medio, Tor Wennesland. Una delegación de seguridad egipcia acudió este miércoles a la Franja de Gaza en una visita breve en la que se reunieron con las facciones palestinas para llegar a un acuerdo de alto el fuego con Israel, para el que intentan mediar junto a Qatar y la ONU.
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó este miércoles la disposición a retomar las consultas de los mediadores internacionales para Oriente Medio, el llamado Cuarteto de Madrid, en el contexto de la nueva espiral de tensiones entre Palestina e Israel. «Estamos dispuestos a reanudar el trabajo del cuarteto y contribuir al diálogo entre las partes del conflicto», dijo Guterres en conferencia de prensa conjunta con el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, en Moscú.
El jefe de la ONU llamó a «lograr una desescalada del conflicto para proteger las vidas de los civiles, que mueren en unas circunstancias absolutamente inaceptables». Los integrantes del cuarteto involucrado en el proceso de paz del conflicto árabe israelí son la ONU, la Unión Europea, Estados Unidos y Rusia.
En tanto, el Consejo de Seguridad de la ONU volvió a fracasar este miércoles en un acuerdo sobre el conflicto entre israelíes y palestinos debido a la persistente oposición de Estados Unidos, principal aliado del Estado hebreo, según diplomáticos.
El rol de Estados Unidos
El secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, le manifestó a Netanyahu el firme apoyo de Washington a su derecho a defenderse de los ataques con cohetes, dijo el vocero del Departamento de Estado, Ned Price.
«El secretario expresó sus preocupaciones relacionadas al aluvión de ataques con cohetes contra Israel y el firme apoyo de EE.UU. al derecho de Israel a defenderse», dijo el funcionario sobre la conversación telefónica entre Blinken y Netanyahu.
«No queremos ver provocaciones. Las provocaciones que hemos visto han resultado en una pérdida de vidas profundamente lamentable», acotó Price, al condenar los «ataques terroristas» del movimiento islamista Hamás. También, reafirmó que los palestinos tienen «el derecho a tener seguridad». «Seguimos pidiendo calma, seguimos pidiendo a todas las partes que reduzcan la escalada y actúen con moderación», añadió.
Estados Unidos enviará «inmediatamente» al subsecretario adjunto para Asuntos Palestinos e Israelíes del Departamento de Estado, Hady Amr, a la región para mediar en el conflicto y reunirse con líderes israelíes y palestinos, señaló el Departamento de Estado.
Putin y Erdogan
El presidente ruso, Vladimir Putin, llamó este miércoles a la «desescalada» en el conflicto durante una conversación con su par turco, Recep Tayyip Erdogan, quien reclamó «dar una lección» a Israel. Según el Kremlin, Putin y Erdogan «expresaron su gran preocupación por los combates que continúan, el creciente número de muertos y heridos», y «llamaron a las partes a una desescalada de la tensión».
El presidente ruso mantiene buenas relaciones con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, con los dirigentes palestinos y el jefe de Estado turco. La presidencia turca, por su parte, evocó una posición más ofensiva de Erdogan quien, durante la conversación telefónica, urgió a la comunidad internacional «a dar una lección firme y disuasiva a Israel». El dirigente turco denunció así la «descarada agresión contra la mezquita de Al Aqsa [en Jerusalén] y los palestinos», aseguró esta fuente. El presidente turco también destacó «la necesidad de trabajar en la idea de desplegar una fuerza de protección internacional para proteger a los civiles palestinos».
Alerta de la CPI
La fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Fatou Bensouda, mostró su preocupación este miércoles por la violencia que se vive en los territorios palestinos y en Israel y alertó de que se pueden estar cometiendo nuevos crímenes. «Asisto con una gran preocupación a la escalada de violencia en Cisjordania, incluyendo Jerusalén-Este, así como en Gaza y en sus alrededores, y a la posible comisión de crímenes en el marco de Estatuto de Roma», texto fundador de la CPI, escribió en Twitter la fiscal.
La CPI había anunciado en marzo la apertura de una investigación sobre presuntos crímenes de guerra en los territorios palestinos, una decisión criticada por Israel y bien recibida por los palestinos. Bensouda había declarado que existían «bases razonables» para creer que miembros de las fuerzas israelíes, de las autoridades israelíes, del movimiento islamista palestino Hamás y de grupos armados palestinos habían cometido crímenes durante la guerra de Gaza en 2014.
Denuncian censura
Los internautas palestinos denuncian ser víctimas de la censura en las redes sociales, con la suspensión de cuentas en Twitter o contenidos bloqueados en Instagram que muestran la represión de las fuerzas de seguridad israelíes. Esta semana usuarios palestinos de redes sociales colgaron fotos y videos mostrando a las fuerzas israelíes, fuertemente armadas, dispersando a los movilizados en Jerusalén Este.
Sada Social, una plataforma que protege los contenidos compartidos por los palestinos en Internet, ha sufrido centenares de restricciones durante la semana pasada en cuestiones vinculadas a Sheij Jarrah y Jerusalén Este. «Se trata del cierre de cuentas, tanto en Twitter como en Instagram, o el bloqueo de funciones de esta última, como la transmisión de videos en directo, o las restricciones a acceder a contenidos sobre Sheij Jarrah, Gaza o Jerusalén», declaró Eyad Rifai, director de Sada Social.