Será la primera vez en ocho años que se reúnan los jefes de Estado y de Gobierno de los dos bloques, en un intento por avanzar una agenda que acusa fuerte estancamiento.
El Gobierno de Cuba denunció este lunes que «la falta de transparencia y la conducta manipuladora de la Unión Europea» han puesto «en serio riesgo» el éxito de la cumbre birregional entre el grupo europeo y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), a celebrarse el 17 y 18 de julio en Bruselas, Bélgica.
«Se intenta imponer formatos restrictivos, divisivos, que imposibilitarían discusiones directas y transparentes, y se pretende ocultar a la prensa y a la opinión pública el contenido de los debates», aseguró el canciller cubano, Bruno Rodríguez, a través de un video difundido en su perfil de Twitter.
De acuerdo con el diplomático, el bloque europeo organizó «de forma unilateral, foros paralelos a la cumbre», con representantes latinoamericanos y caribeños electos al margen de la Celac.
En criterio de La Habana, esto, «además de irrespetuoso», genera «condiciones» para que esos espacios «se conviertan en escenarios de ataques y singularizaciones» contra determinados países.
América Latina cambió
En su intervención, Rodríguez recalcó que la región «ha cambiado» y que la Celac «es la voz sólida y unitaria de la América Latina y el Caribe», y que por lo tanto, «debe ser respetada».
En la misma línea advirtió que no tendrían «ninguna posibilidad de éxito en Bruselas aquellos que intenten imponer una visión sesgada y europeísta en la relación birregional», que deja de lado «las prioridades e intereses» latinoamericanos y caribeños.
En contraste, indicó, para las autoridades cubanas, «la cumbre puede –y debe ser– un espacio de diálogo serio, participativo y plural», que permita avanzar hacia soluciones sobre problemas de interés compartido como el cambio climático, la seguridad alimentaria, las energías verdes o el financiamiento para el desarrollo.
Aspiraciones legítimas
El jefe de la diplomacia cubana destacó que su país aspira «a una cita que reafirme el estricto respeto a la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional y los postulados de América Latina y el Caribe como zona de paz».
Pese a lo dicho, apuntó que la delegación de la nación antillana concurrirá a la cumbre de Bruselas «con espíritu constructivo» y pondrá sus mejores esfuerzos para «fortalecer, sobre bases de igualdad y respeto mutuo», los intercambios entre los dos bloques.
Integración birregional estancada
La III Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno Celac-UE será la primera reunión de alto nivel de las dos organizaciones regionales en ocho años y tendrá lugar en medio de grandes tensiones geopolíticas globales.
Además, como advirtiera el jefe de la diplomacia cubana, en el lapso transcurrido desde el último encuentro de jefes de Estado y de Gobierno, la cooperación interregional acusa signos de estancamiento e incluso, de retroceso.
De especial interés para Bruselas es el acuerdo comercial UE-Mercosur, cuyo cierre no tiene fecha a la vista, en virtud de las amenazas de la parte europea sobre sus pares suramericanos.
Sobre este asunto, en fecha reciente, el presidente brasileño, Lula da Silva, señaló que acudiría a la capital europea con sus homólogos de Argentina, Paraguay y Uruguay para «discutir» seriamente con los representantes de la UE.
«Queremos hacer una política de ganar-ganar. No queremos hacer una política en la que ellos ganen y nosotros perdamos», recalcó.