Prensa Latina
La toma de posesión en Nicaragua del presidente Daniel Ortega y la vicemandataria Rosario Murillo, estuvo mediada este 10 de enero por la firma de cuatro convenios de cooperación con China.
Indudablemente, el nuevo periodo del ejecutivo del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) contará con el respaldo cercano del país asiático pues, el propio presidente Xi Jinping, mostró su satisfacción con el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y el reconocimiento a una sola China.
La delegación asistente a la juramentación de los máximos cargos de dirección del país, encabezada por Cao Jianming, vicepresidente de la Asamblea Popular Nacional, reconoció el liderazgo del FSLN en los proyectos de beneficio ciudadano y la promoción del desarrollo socioeconómico.
«Nuestra meta es darle marcha a la continuidad que traíamos antes de abril de 2018, (…) La Revolución de China y la Revolución Sandinista, poseen un mismo norte, camino y destino que es la erradicación de la pobreza», expresó Ortega desde Managua, ante una veintena de comitivas internacionales.
En el acto de juramentación, con la presencia de tres presidentes: Miguel Díaz-Canel, de Cuba; Nicolás Maduro, de Venezuela, y Juan Orlando Hernández, de Honduras, el líder nicaragüense indicó su compromiso con la continuidad de la lucha por la defensa de la soberanía, independencia y autodeterminación.
El mandatario, reelecto para su cuarto periodo consecutivo en los comicios del 7 de noviembre pasado, advirtió que la construcción de la paz es la herramienta indispensable en el desarrollo de la infraestructura, generación de empleos, acceso a servicios básicos y seguridad.
Asimismo, exigió al gobierno de Estados Unidos el respeto a la sentencia del 27 de junio de 1986 de la Corte Internacional de Justicia, la cual establece la indemnización para Nicaragua, por el financiamiento y organización de actividades militares contra el gobierno y pueblo de la nación centroamericana.
«Ellos dicen que son respetuosos de la ley, por tanto, el presidente norteamericano Joe Biden tiene la oportunidad en estos momentos de hacer un giro histórico y valiente, con el cual nos indemnice, es un acto de justicia y no de limosna», advirtió el jefe de Estado.
¿Reconfiguración internacional?
Este 10 de enero constituyó la ratificación de la decisión popular y la reafirmación del modelo cristiano, socialista y solidario, la continuidad de una gestión responsable y voluntad política institucionalizada de un gobierno comprometido con las demandas de la sociedad nicaragüense, resaltó el académico Jonathan Flores.
Para el docente de filosofía e investigación científica de la Universidad Autónoma de Nicaragua (UNAN- Managua), cada territorio define su política exterior de manera soberana y la restitución de los vínculos con China abre, a su juicio, la posibilidad de encontrar nuevos mercados y lazos diplomáticos en esa región.
Igualmente, China posee numerosos acuerdos de cooperación con naciones de América Latina y el Caribe, los cuales comenzaron en Nicaragua desde la década de 1960, continuaron luego del triunfo de la Revolución Sandinista, el 19 de julio de 1979, y experimentaron una interrupción abrupta en 1990.
El nuevo periodo 2022-2027 avanza también con otros cambios en materia de política exterior, entre ellos, el proceso de salida de la Organización de Estados Americanos, decisión asumida por los diferentes poderes estatales ante las reiteradas violaciones cometidas por el foro regional.
«Nicaragua asume una postura de respeto de la voluntad, decisiones y autodeterminación de todos los países del mundo, sobre todo, a partir de 1979, y apuesta por los principios de la amistad, complementariedad y reciprocidad con los pueblos del mundo», apuntó a Prensa Latina.