Tras la negativa de De Ligt y el gasto de Griezmann, y el posible en Neymar, el club pretende reforzarse solo con un lateral izquierdo
Cuando acabó la temporada, la hoja de ruta del área deportiva del Barcelona era bien diáfana. Se pretendía fichar a un delantero que pudiera desempeñarse en todas las posiciones de ataque y que compitiera con Luis Suárez (Griezmann); se deseaba incorporar a un central con futuro para dar relevo a Piqué o Lenglet (De Ligt); se quería traer a un lateral izquierdo que incomodara y mejorara la última versión de Jordi Alba; y se filtraba que llegaba un centrocampista de toque y criterio como De Jong, capaz de girar con el balón en los pies y pieza de encaje en el fútbol de posición azulgrana. Pasados los días, sin embargo, hay una pequeña variante: el Barça ya no busca a un central porque el dinero no es elástico y no se ha recibido oferta alguna por Umtiti, zaguero con el que en un principio no se contaba. Pero ya sí.
La decisión, en cualquier caso, ha estado condicionada por la negativa de Matthijs de Ligt, central del Ajax que era la gran apuesta del club para la zaga, pero que exigió cobrar casi lo mismo que Piqué y más que su amigo De Jong, además de la titularidad. Premisas que el Barça no pudo contentar y que parecen colmar desde la Juve, donde se presupone que jugará porque desde el Camp Nou ya no piensan en él, disgustados por cómo ha tratado de negociar su representante Mino Raiola. Así, sin De Ligt ni Vermaelen —acabó contrato y sigue libre, sin equipo—, Umtiti recobrará protagonismo, confiados en que su maltrecha rodilla aguante.
Resulta que desde el club mantienen la idea de que el francés no está bien de la rodilla, reacio a operarse por más que se le haya insistido en un par de ocasiones. Se probaron infiltraciones de plasma con plaquetas y células madre, se le envió a la clínica Aspetar de Doha para intensificar el tratamiento tras una recaída y el Barça acabó por acudir al mercado de invierno para traer a Jeison Murillo, que llegó del Valencia cedido para jugar un par de partidos de escasa exigencia competitiva y ya está en la Sampdoria italiana. Durante la travesía, sin embargo, Lenglet se ensambló en el sitio y llegó también Todibo del Toulouse, por un millón de euros, puesto que el jugador estaba apartado por no querer renovar con la entidad francesa. “Tiene muchísimo potencial y se está adaptando bien a las ideas del juego, por lo que este puede ser su año si responde a las exigencias del puesto”, señalan desde las oficinas de la ciudad deportiva; “porque en el Barça, el puesto de central es el más complicado porque necesitamos que sepan sacar el balón desde atrás, que sean rápidos en la corrección y que no tiemblen cuando se quedan con muchos metros a sus espaldas”.
Recompra de Cucurella
Con la anunciada irrupción de Todibo y la incógnita de Umtiti, Lenglet y Piquéaspiran a liderar de nuevo el eje de la zaga, rechazada la opción de invertir en otra pieza porque Griezmann ha costado 120 millones —el Barça ha pedido un crédito para sufragar parte de la adquisición— y porque se pretende hacer un esfuerzo para traer de vuelta a Neymar, que ya ha advertido al PSG de que sus goles pertenecen al Camp Nou. Lo que no quita que sí se pretenda fichar a un lateral izquierdo porque a Miranda —suplente anónimo de Alba en esta temporada— se le busca una salida.
Queda por ver si el club consigue cerrar la operación de la banda izquierda, pero por si las moscas decidió ejercer ayer la opción de compra que tenía sobre Cucurella, que jugó en el Eibar la pasada temporada. En principio, también se le buscará un destino —conocedores como son de que tiene pretendientes y pueden hacer caja—, pero cabe la posibilidad de que se quede si no llega otro refuerzo y se gaste todo el dinero en repatriar a Neymar.
VÍCTOR VALDÉS, A PUNTO DE COGER EL JUVENIL A
Aunque dejó el Barcelona en 2014 con un regusto amargo porque se marchó lesionado tras defender la portería durante 12 años, Víctor Valdés está a un paso de volver al club azulgrana como entrenador del Juvenil A. Con las negociaciones ya en marcha, se presupone que al final de la semana se anunciará su regreso y también relevo para Denis Silva en el banquillo. Valdés comenzó el año pasado su carrera como técnico en el Moratalaz madrileño, con el que ganó la Copa de Campeones juvenil de Madrid tras imponerse en la final al Real Madrid.