Vicente Zeballos celebró en una entrevista la decisión de Mercedes Aráoz de rechazar su juramentación como «presidenta interina», y confirmó que los comicios parlamentarios se concretarán.
El nuevo jefe de Gabinete peruano, Vicente Zeballos, celebró en una entrevista con Canal N la decisión de Mercedes Aráoz de cancelar su decisión de proclamarse como mandataria interina del país andino ante el Poder Legislativo. Al mismo tiempo, confirmó que las elecciones parlamentarias tras la disolución del Congreso se llevarán a cabo y ratificó que el presidente, Martín Vizcarra, continúa en el cargo.
«Aráoz está corroborando una actitud democrática, le tengo las mayores consideraciones», sostuvo el funcionario. En efecto, luego de que el Ejecutivo haya ordenado anular al Parlamento, los congresistas votaron por suspender a Vizcarra de sus funciones durante 12 meses, y ella juramentó como «presidenta interina». Sin embargo, a las pocas horas anunció que daba marcha atrás con esa decisión.
Así, Zeballos comentó que «las elecciones parlamentarias ya están convocadas». A su vez, confirmó: «No hay marcha atrás en ese sentido, hay un proceso regularizado». Por otro lado, negó que se fueran a producir comicios presidenciales en Perú, ya que el mandatario «está en ejercicio y no va a renunciar». En otras palabras, aclaró: «¿Cuándo se motiva a elecciones generales? Tendría que renunciar el presidente, la vicepresidenta y pasar al titular del Congreso. Esa circunstancia no está dada».
Asimismo, se espera que este político conforme su Gabinete en los próximos días, a más tardar el viernes, tras asumir la dirección del Consejo de Ministros el último lunes, tras la salida de Salvador del Solar.
- ¿Aráoz renunció a la Vicepresidencia?
- Mercedes Aráoz publicó el martes en Twitter su decisión de renunciar a la Vicepresidencia del país, además de rechazar el cargo de «presidenta interina», habiendo sido nombrada por el Congreso disuelto. Sin embargo, la renuncia al segundo cargo más importante de la política peruana la hizo ante el Parlamento, cuyo funcionamiento fue suspendido por el Ejecutivo.
«Desde una perspectiva constitucional legal, sigue siendo vicepresidenta», consideró Zeballos en una entrevista con RPP. Y siguió: «Renunció ante el presidente del Congreso y el Congreso no existe. Ha quedado disuelto».
¿Qué está pasando en Perú?
La nación sudamericana atraviesa una crisis institucional histórica, que tiene enfrentado al Ejecutivo con el Parlamento, donde ninguno de los dos poderes estatales se reconocen entre sí.
Todo comenzó cuando el Gobierno interpretó que la oposición fujimorista, de mayoría parlamentaria, intentaba colocar jueces afines en el Tribunal Constitucional (TC), que se lleva a cabo mediante votaciones legislativas. Entonces, Presidencia presentó una «cuestión de confianza» para ser tratada por los congresistas, con la cual proponía modificar el sistema de elección de magistrados.
En Perú, si el Parlamento rechaza este mecanismo por segunda vez, ante dos Gabinetes distintos durante una misma Administración, el Gobierno puede ordenar disolver el Congreso. Si bien es cierto que el Parlamento aprobó la cuestión de confianza, prosiguió nombrando a otro magistrado para el TC con el sistema tradicional. Es decir: Vizcarra entendió que pese a la aprobación, en la práctica se había rechazado, y tenía la capacidad de anular al cuerpo legislativo, como finalmente ocurrió.
Al mismo tiempo, el Congreso disuelto votó la suspensión del presidente por 12 meses, y luego juramentó en su lugar la vicepresidenta, Aráoz. Acto seguido, el Ejecutivo envió a las fuerzas de seguridad para bloquear el Parlamento y restringir su acceso, porque, en su criterio, no debería seguir funcionando. Asimismo, la Organización de Estados Americanos (OEA) optó por no interceder y expresó que el Tribunal peruano debería determinar si la anulación del Congreso es válida o no.
Por último, además de renunciar a la Vicepresidencia, Aráoz decidió cancelar su juramentación como «presidenta interina». Con este panorama, sigue vigente la convocatoria a elecciones parlamentarias para el 26 de enero, y Vizcarra se mantiene en el cargo. Por otro lado, resta por ver si el Tribunal Constitucional emite alguna consideración ante esta crisis política.