El presidente venezolano aseguró que el país cuenta con una doctrina militar soberana que no está sujeta a los dictámenes de ningún imperio.
Los tiempos de la Doctrina de Seguridad Nacional de los EE.UU. llegaron a su fin en Venezuela, aseguró este miércoles el presidente Nicolás Maduro, en los actos de conmemoración del 212.º aniversario de la Independencia del país suramericano de la corona española.
“Hoy Venezuela tiene una doctrina militar venezolana, netamente venezolana, hecha de nuestra historia, construida de nuestras mentes, pertinente a la realidad nacional y que no depende de ninguna doctrina imperial del mundo para dominar a nuestra América. Los tiempos de la Doctrina de la Seguridad Nacional del Comando Sur de los EE.UU. se acabaron para siempre en Venezuela y no volverán jamás”, sostuvo el mandatario en un discurso pronunciado ante las tropas que esperaban para iniciar el tradicional desfile militar en Caracas.
En otro punto de su intervención recalcó que Venezuela había “vuelto a declarar ante el imperio norteamericano y ante los viejos colonialistas de Europa” su “voluntad absoluta” de ser, hoy y siempre, “una nación libre, soberana, independiente, digna y rebelde”.
“Sintamos el orgullo de poder decir que conmemoramos en Venezuela, territorio libre de América, los 212 años de la Declaración de Independencia de pie, con dignidad, sin sumisión al imperio norteamericano, sin arrodillarnos a ningún imperio del mundo”, añadió.
Independencia plena
Maduro definió la independencia como “un asunto de dignidad” y a ese respecto exhortó a la ciudadanía a cultivar “la identidad nacional y el orgullo nacional”, para construir una “conciencia superior basada en el amor” a la patria, en interés de alcanzar la “independencia cultural”.
En su decir, esta meta se lograría a partir de la “educación en valores […] de la organización del poder popular en cada comunidad, de la organización del pueblo como expresión de la conciencia superior, de una democracia directa, de una democracia participativa y protagónica”.
A lo anterior sumó la independencia “científica y tecnológica” para hacer frente a los desafíos que entraña la satisfacción de las necesidades de salud y alimentación de la población a través de la producción nacional.