* Entre 2014-2018, la NED repartió un millón 606 mil 228 dólares entre varias ONG golpistas; Carlos Fernando Chamorro recibió en ese periodo US$ 470,000. Indicaciones provienen directamente de Estados Unidos y giran en torno a la capacitación y entrenamiento de jóvenes y mujeres para enfrentar al gobierno del presidente Daniel Ortega.
Entre 2014 y 2018, la National Endowment for Democracy (NED), la ejecutora civil de los planes de la CIA, que desde hace varias décadas se dedica a desestabilizar gobiernos a través de la compra de medios de comunicación, periodistas, sindicatos, políticos, etc., entregó a la oposición de Nicaragua US$ 1,606,228 como parte del financiamiento que brinda a sus agentes locales agrupados en distintas ONG.
El millón 606 mil 228 dólares fue repartido entre Invermedia, una de cinco empresas de Carlos Fernando Chamorro Barrios, actualmente autoexiliado en Costa Rica. Además, el IEEPP, de Félix Maradiaga, prófugo de la justicia nicaragüense y protegido por el gobierno de Estados Unidos.
También aparecen con buena tajada, Marcos Carmona, de la CPDH; la Fundación Iberoamericana de las Culturas (FIBRAS), una de las que reparte dinero entre periodistas; Hagamos Democracia, manejada hasta no hace mucho por Violeta Granera; la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (FUNIDES), de Juan Sebastián Chamorro García.
Además, los organismos gringos Center for International Private Enterprise (CIPE) y el Instituto Republicano Internacional (IRI), del partido de Donald Trump.
A Carlos Fernando Chamorro Barrios, el mismo señor que se autoproclama “periodista independiente”, la NED, es decir, la Central de Inteligencia Americana (CIA), le entregó en los últimos tres años, US$ 470,000 para diversos proyectos, todos dirigidos a preparar personal, en particular periodistas, para enfrentar al gobierno del presidente Daniel Ortega.
Para “premiar” a periodistas a través del proyecto “Fortalecimiento de medios independientes en línea”, la NED entregó en 2017 a Chamorro Barrios US$ 75,000, a fin de dizque “promover la libertad de expresión y los medios independientes en Nicaragua”.
Invermedia, o sea, Carlos Fernando, se comprometió a “trabajar para consolidar y ampliar el alcance de un sistema digital independiente de noticias y producir una serie de informes de investigación sobre los problemas que afectan a los nicaragüenses”.
Para idéntico fin al anterior, Chamorro Barrios recibió de la NED en 2015 un total de US$ 100,000, con la orientación específica para los medios digitales de “establecer relaciones de trabajo con las principales organizaciones de la sociedad civil para proporcionarles un medio de comunicación y una plataforma para la acción coordinada”. Es decir, o se unían a las ONG golpistas o no recibirían dinero.
Siempre para los medios digitales, en este caso específicamente “Confidencial”, en 2014 la NED dio a Chamorro Barrios US$ 60,000 con el compromiso de “realizar informes de investigación sobre temas que afectan a la democracia nicaragüense.
“Confidencial también establecerá relaciones de trabajo con las principales organizaciones de la sociedad civil, con el fin de proporcionar una plataforma de medios para la acción coordinada. Confidencial fortalecerá su presencia en las redes sociales”.
La CIA le encargó “promover la libertad de expresión y los medios independientes en Nicaragua. La organización trabajará para consolidar y ampliar el alcance de una plataforma independiente de noticias Digi. El concesionario producirá una serie de informes de investigación sobre los problemas más destacados que afectan a los nicaragüenses”.
Para decir la verdad, uno de los grandes problemas en Nicaragua es Carlos Fernando Chamorro Barrios y no lo vemos haciendo ninguna investigación sobre las molestias que causa su familia desde hace largo tiempo en este sufrido país.
A Chamorro Barrios, que tiene nexos muy cercanos con el movimiento lésbico opositor en Nicaragua, también le dieron US$ 74,794 para el “Fortalecimiento del papel de las mujeres en defensa de la democracia nicaragüense”.
La orden de la CIA: “Promover los valores democráticos y los derechos humanos de las mujeres en Nicaragua. Se fortalecerá la capacidad de las mujeres para defender sus derechos y la democracia nicaragüense. Los informes sobre la situación de los derechos humanos de las mujeres en Nicaragua aumentarán la conciencia internacional y nacional”.
Dora María Téllez, Ana Margarita Vijil, Azahálea Solís, Sofía Montenegro y otras señoras de la diversidad sexual, lo único que han hecho es sembrar el odio en el país.
Invermedia también obtuvo de la NED-CIA en 2017, US$ 100,000 para el “Fortalecimiento de la capacidad estratégica de la sociedad civil para defender la democracia”.
¿La orden? “Fortalecer la capacidad de los activistas pro democracia de Nicaragua para forjar una estrategia común de la sociedad civil para defender la democracia. Publicaciones periódicas abarcarán el estado de la democracia y la situación de los derechos humanos en Nicaragua. Un grupo de organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales convocarán una serie de foros para discutir su contenido e identificar oportunidades de defensa”.
Ahí los tenemos pintados de cuerpo entero. La orden de organizarse en un solo bloque en contra del gobierno sandinista del presidente Daniel Ortega, provino directamente del cuartel de la Central de Inteligencia Americana (CIA), que utiliza como pantalla a la NED.
¿Queda alguna duda de la complicidad entre Carlos Fernando Chamorro Barrios y resto de golpistas que intentaron tumbar al gobierno sandinista el año pasado?
El IEEPP
En 2017, el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicos (IEEPP), de Félix Maradiaga, recibió de la NED US$ 55,000 para “Democracia y Seguridad Ciudadana en Nicaragua”.
El objetivo escrito señala que dicho dinero era para “concientizar sobre la seguridad ciudadana en Nicaragua, alentando el debate y generando información sobre seguridad y violencia. Se recopilarán y analizarán datos sobre temas relacionados con el crimen y la violencia en Nicaragua, con un enfoque en los conflictos sociales y la violencia motivada políticamente en las comunidades rurales. El personal local será capacitado para monitorear los conflictos y promover una cultura de paz”.
Hasta parece un chiste de mal gusto, porque Maradiaga utilizó esos 55 mil dólares para un fin totalmente distinto al supuestamente acordado, ya que se vio involucrado en las más de 200 muertes de nicaragüenses desde su guarida en la UPOLI durante el transcurso del fallido golpe.
Para el “Fomento de una nueva generación de líderes democráticos juveniles”, a Maradiaga la NED le entregó US$ 86,000, con la obligación de “promover los valores democráticos y la participación de los jóvenes en Nicaragua. Los foros en escuelas y universidades educarán a los estudiantes sobre los valores democráticos y los derechos humanos. Una red de líderes juveniles fomentará un papel más activo de los jóvenes en la defensa de la democracia”.
Si habían dudas, queda claro el involucramiento de grupos de estudiantes universitarios reclutados por la “sociedad civil” a través de las ONG opositoras. La orden les vino desde las propias oficinas de la Central Intelligence Agency (CIA), en Langley, Virginia, a través de su mampara, la NED.
Le orientaron, además, una revista, para que junto a las redes sociales, facilitarán el debate sobre temas relacionados con la juventud y el activismo democrático.
Luego aparece la Comisión Permanente de Derechos Humanos de Nicaragua (CPDH), del tristemente célebre Marcos Carmona, quien en 2017 recibió US$ 72,440 para “promover y proteger los derechos humanos en Nicaragua”.
Previendo que en sus afanes golpistas tarde o temprano terminarían enfrentándose a la justicia, Carmona recibe la orden de la NED de “proporcionar asistencia legal a los ciudadanos que enfrentan desafíos para acceder al sistema de justicia.
“Se controlarán las condiciones humanas en las cárceles y los centros de detención y se presentarán a las autoridades pertinentes las propuestas para mejorarlas. Se utilizarán mecanismos internacionales para monitorear y denunciar violaciones a los derechos humanos y crear conciencia sobre las obligaciones internacionales del país…”.
Marcos Carmona también recibió como suplemento US$ 39,000 para “Promover elecciones municipales libres y justas” en las municipales de 2017.
La orden de la NED-CIA expresaba: “Promover elecciones libres y justas en Nicaragua. En asociación con otras organizaciones, activistas locales y voluntarios recibirán capacitación para monitorear y documentar cualquier irregularidad en las votaciones durante las elecciones municipales de noviembre de 2017. Un centro de llamadas recibirá informes de violaciones a los derechos humanos durante el día de las elecciones e información al público sobre sus hallazgos”.
No estaba escrito, pero todos sabíamos que lo que interesaba a la CPDH y a sus patrones, los gringos, era declarar fraudulento cualquier resultado adverso para la derecha nicaragüense.
En tanto, la Fundación Iberoamericana de las Culturas (FIBRAS), ejecutó US$ 79,423 en el proyecto “Promoviendo los valores democráticos y la organización entre los activistas de la sociedad civil”, que no era otra cosa que una plataforma para atacar los programas desarrollados por el gobierno.
A FIBRAS le ordenaron “promover los valores democráticos y la gobernabilidad democrática a nivel local en Nicaragua. Los capítulos locales y los miembros recibirán capacitación para abogar por reformas democráticas en el país. Se llevarán a cabo foros y talleres sobre educación cívica sobre democracia y se producirán y transmitirán 48 programas de radio que abordan temas relacionados con la democracia en Nicaragua”.
En su totalidad fueron transmitidos en radioemisoras que a su vez recibían subvención de parte de organismos injerencistas de Estados Unidos, incluyendo a la NED, USAID, IRI, NDI y Soros, entre otros muchos.
Igualmente, FIBRAS recibió US$ 45,000 en el proyecto “Promoviendo la libertad de expresión en Nicaragua”, cuyo fin era “fortalecer los medios independientes y el periodismo ciudadano en Nicaragua. Una campaña en los medios de comunicación locales promoverá los valores democráticos y apoyará el trabajo en red y los esfuerzos de colaboración de los radios independientes”.
Ese “periodismo ciudadano” apoyado por la NED a través de las ONG golpistas, es el mismo al que el nuncio apostólico en Nicaragua Stanislaw Waldemar Sommertag, les acaba de decir mentirosos y tramposos, por torpedear los intentos de paz que él apoya para el restablecimiento de la normalidad en nuestro país.
Hagamos Democracia, a cuya cabeza estuvo la golpista Violeta Granera, recibió US$ 80,000 para el proyecto “Promoviendo la supervisión legislativa y elecciones libres y justas
¿La orden que les dio la NED? “Promover la transparencia y la rendición de cuentas de la Asamblea Nacional de Nicaragua. La organización supervisará las sesiones de la Asamblea Nacional y el fondo discrecional asignado a los legisladores. El concesionario publicará sus hallazgos en un boletín trimestral y creará conciencia sobre la necesidad de una mayor transparencia en el proceso legislativo”.
Y pensar que los dueños de las ONG golpistas se enfurecen cada vez que el Ministerio de Gobernación les exige rendición de cuentas a como mandata la ley. ¿Quién faculta a Hagamos Democracia para supervisar a la Asamblea Nacional?
FUNIDES, de Juan Sebastián Chamorro García, fue usufructuaria en 2017 de US$ 40,000 para “Sensibilización sobre las preferencias de los jóvenes en la participación ciudadana”. ¿Qué significa “sensibilizar” a los jóvenes? Convertirlos en enemigos del sandinismo a través de la compra de conciencias.
La orden para Chamorro García fue “promover una mayor comprensión de las preferencias de los jóvenes en la participación ciudadana en Nicaragua. La organización recopilará información sobre cómo los jóvenes nicaragüenses se comunican entre sí y con otros para participar en asuntos sociales y políticos.
“La organización producirá y difundirá un informe que contiene los hallazgos del estudio y las mejores prácticas para las organizaciones de la sociedad civil y los actores políticos para promover la participación cívica de los jóvenes”. Y lograron confundir a algunos que participaron en el fracasado golpe de Estado, sólo que su actuación no tuvo nada de “cívica” a como quisieron hacer creer.
El International Republican Institute (IRI), del partido de Donald Trump, ejecutó en Nicaragua US$ 150,000 en 2017, en el proyecto “Sensibilización sobre los efectos de la corrupción en ciudadanos”.
¿Podría el partido FSLN ir a Estados Unidos a ejercer control sobre los graves abusos del gobierno norteamericano relacionados con racismo, discriminación, torturas, asesinatos de minorías étnicas, asesinatos en serie y masivos, intervencionismo e invasiones sangrientas a otros países, crímenes de guerra, noticias falsas, intrusiones en las redes sociales, y un montón de etcéteras? Claro que no.
Pero aquí el IRI se toma la facultad de “fortalecer los esfuerzos de vigilancia anticorrupción. El instituto proporcionará a los actores cívicos herramientas, técnicas y recursos para llevar a cabo nuevos y fortalecer los análisis de investigación sobre los efectos negativos de la corrupción en los ciudadanos.
“Las actividades aumentarán la concientización y mejorarán la alfabetización cívica para proporcionar supervisión y responsabilidad del gobierno, el instituto también ayudará a los actores cívicos a difundir sus hallazgos a través de una campaña de concientización de base”.
Otro intruso extranjero es el Centro para la Empresa Privada Internacional (CIPE, por sus siglas en inglés), que en 2017 recibió de la NED US$ 239,571, a fin de “aumentar la capacidad de las mujeres empresarias para abogar por una reforma económica y social, y para ampliar el apoyo del sector público y privado a las políticas que mejoran el empoderamiento económico de las mujeres.
“El centro y su red de socios promoverán una agenda de promoción para reducir las disparidades de género en la esfera económica mediante la organización de una serie de talleres para mejorar la capacidad de defensa de las mujeres y liderar esfuerzos específicos de promoción a través de medios sociales y tradicionales, reuniones de trabajo con el sector público y privado”.
Un total de US$ 1,606,228 de la NED-CIA para varias ONG de Nicaragua, que a la vez son alimentadas con muchos millones de dólares salidos de las arcas de la USAID, NDI, IRI, Fundación Soros, Unión Europea y muchos otros organismos de la ultraderecha internacional, enfrascados en aniquilar a los gobiernos progresistas en América Latina.
Aquí algunos de los documentos en poder de Nicaleaks: