El presidente ruso advirtió que Kiev, bajo sugerencias de sus patrocinadores occidentales, está haciendo «una apuesta peligrosa en la escalada de las hostilidades».
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, mantuvo este miércoles una conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, en la que calificó el ataque contra la central hidroeléctrica de Kajovka, en la provincia rusa de Jersón, como una «acción bárbara» perpetrada por Ucrania.
Putin denunció que Kiev, bajo sugerencias de sus patrocinadores occidentales, está haciendo «una apuesta peligrosa en la escalada de las hostilidades», cometiendo «crímenes de guerra, utiliza abiertamente métodos terroristas y organiza sabotajes en territorio ruso».
Un claro ejemplo de ello es la «bárbara acción para destruir» la central hidroeléctrica de Kajovka, que desembocó en «una catástrofe medioambiental y humanitaria de gran envergadura», agregó.
Por otro lado, en la conversación telefónica el mandatario ruso volvió a felicitar a Erdogan por su victoria en las recientes elecciones presidenciales. Además, las partes abordaron otros temas, incluida la cooperación bilateral y una mayor coordinación entre Moscú y Ankara en las diferentes organizaciones internacionales.
- En la madrugada de este martes, las tropas ucranianas realizaron un bombardeo contra la central hidroeléctrica de Kajovka, lo que destruyó las válvulas y la parte superior de la presa.
- El daño a la infraestructura provocó que el agua de la represa comenzara a descargarse descontroladamente, provocando inundaciones masivas en ambos lados del río Dniéper.
- Las autoridades locales calificaron el bombardeo como un «grave acto de terrorismo» y recordaron que las fuerzas ucranianas han venido atacando la represa desde verano pasado.
- Desde Kiev y la Unión Europea responsabilizan a la parte rusa del ataque contra la central hidroeléctrica.