El presidente ruso llegó el miércoles a la capital brasileña en una visita de dos días para participar en la cumbre anual de los BRICS.
El grupo BRICS es «un factor de estabilidad» no solo en la política, sino también en la economía global, y a medida que cambie la situación del mundo el papel del bloque «irá aumentando». Así lo ha declarado el presidente ruso, Vladímir Putin, en una rueda de prensa en el marco de la XI cumbre anual de los BRICS, que se celebró el 13 y 14 de noviembre en la capital brasileña.
«Miren lo que está sucediendo en la economía, miren los números. Este año, los BRICS ya han superado a los países del G7 en términos del PIB», ha enfatizado el mandatario ruso.
El presidente ruso se ha pronunciado sobre la situación en Bolivia, destacando que en estos momentos «hay desgobierno» allí, y que, si bien no hay invasión directa desde afuera, el país latinoamericano «está al borde del caos».
«Ha tenido lugar una situación en la que no hay Gobierno en absoluto. Todas las autoridades vigentes han renunciado al poder», ha afirmado Putin. El caso de Bolivia le recuerda a Libia: «Aunque aquí no hay una intervención militar directa desde el exterior, el país en realidad está al borde del caos. Esta es una señal alarmante», ha agregado.
«Esperamos que, quienquiera que llegue al poder en Bolivia, preserve el interés de desarrollar las relaciones con Rusia. De nuestra parte, estamos dispuestos a cooperar con las autoridades que obtengan un mandato legítimo de parte del pueblo de este país», ha enfatizado el mandatario ruso.
A nivel de la región, Putin ha destacado que las razones económicas suelen estar en el centro de las manifestaciones en América Latina, aunque también existen elementos de interferencia externa. «En América Latina todo cambia muy rápido», ha señalado.
Rusia «se opone a la intervención» en los asuntos internos de los países, recalcó el presidente, expresando su esperanza de que el sentido común y la comprensión de los intereses de la población «prevalezcan sobre las ambiciones políticas».
En ese sentido, Putin ha mencionado como ejemplo a Venezuela. «Sí, hay problemas, pero los venezolanos deben definir el futuro de su país por su cuenta a través de un diálogo entre las distintas fuerzas políticas», ha subrayado.