* “No es por 30 pesos, es por 30 años”, consigna repetida por los chilenos tras años de abusos por parte de gobiernos que no han respondido a las problemáticas que afectan a la población.
Las protestas y reclamos del pueblo de Chile afectan gran parte de ciudades del país suramericano desde el pasado 14 de octubre, especialmente en la capital Santiago, donde se han visto focos de violencia y represión contra la ciudadanía.
Bloqueos de vías, quema de autos, saqueos, cacerolazos y marchas multitudinarias son algunas de las expresiones de las protestas antigubernamentales contra el Gobierno de Sebastián Piñera y que han registrado más de 15 víctimas fatales oficialmente.
La protesta ciudadana se gestó dado el sentir general de la población de expresar su rechazo por el incremento del pasaje en el Metro de Santiago (aumentando 30 pesos, unos 0,04 dólares), y a pesar de que dicha medida ya fue anulada, las manifestaciones a nivel nacional continúan, lo que impulsó el toque de queda a nivel nacional.
Ante este panorama, es necesario aclarar algunos de los más importantes reclamos de la ciudadanía en los últimos años.
Sistema de Pensiones (AFP)
Uno de los temas más controversiales para el pueblo de Chile es el relacionado con las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), quienes aseguran que la riqueza se encuentra acumulada solo para los intereses de quienes las manejan, y no distribuyen lo necesario a los pensionistas.
“La reforma de este Gobierno no soluciona el problema, ni ahora ni cuando esté en régimen (en 48 años más). Debemos actuar hoy para los nueve de cada diez pensionados que reciben menos de 300.00 pesos como jubilación”, sostuvo el diputado por el partido Revolución Democrática, Giorgio Jackson.
Este sistema de retribución, ya obsoleto, fue instalado en 1982 por la dictadura militar de Augusto Pinochet, y a pesar de que Piñera lo ha reconocido como una problemática, la percepción de desigualdad sigue latente en la opinión pública.
Sistemas de Salud y Educación
Chile posee un esquema mixto de atención en cuanto a salud refiere, compuesto por el Fondo Nacional de Salud e Instituciones de Salud Previsional. Sin embargo, la problemática del sector salud radica en el cuestionamiento que se le hacen a factores que inciden en la población general, como la ausencia de hospitales, especialistas, atención primaria para prevenir enfermedades y la reducción de listas de espera.
“En Chile solo el 20 por ciento de la gente puede pagar por una atención de mejor calidad, pero el 80 por ciento de la población tiene que atenderse a través del sistema público. La gente está muy desprotegida”, recalca Gloria de la Fuente, presidenta del medio Chile 21.
Para De la Fuente la educación básica sigue marcando una distancia entre los ciudadanos, y son pocos los que pueden solventar los costos de una formación de calidad.
«La educación básica y media en Chile son espacios de segregación también porque si puedes pagar por una educación básica de calidad, entonces vas a poder acceder a una educación universitaria de buena calidad que te garantiza movilidad social», aseguró.
Transporte público
El aumento en el pasaje del Metro de Santiago no es un problema aislado, pues la movilidad también es un aspecto que busca ser reivindicado por el pueblo chileno. En este sentido, el Transantiago (conocido en la actualidad como Red Metropolitana de Movilidad) sigue sin satisfacer a la gran cantidad de chilenos que acuden a sus puntos para utilizar el servicio, tras 12 años de existencia.
El sistema de transporte de Santiago es el noveno más caro en función del ingreso promedio de sus habitantes, según un estudio de la Universidad Diego Portales, y que fue implementada por la exmandataria Michelle Bachelet.
Privatización de agua
“Chile es el único país del mundo que mantiene privatizadas sus fuentes de agua desde la dictadura. Aquí los empresarios pueden comprar, vender o arrendar agua”, afirmó Rodrigo Mundaca, líder del Movimiento de Defensa del Agua, la Tierra y Protección del Medio Ambiente.
A pesar de la reforma del tal cuestionado Código de Aguas que instauró el Parlamento, sus detractores la califican como insuficiente. Pese a que en Chile el agua es un bien nacional de uso público, se establece que los empresarios privados puedan constituir sobre ella los derechos de aprovechamiento perpetuos.
Escándalos de corrupción
La corrupción es un mal que está arraigado en la opinión pública de Chile, quien ve como diversas administraciones presidenciales y empresas privadas, son salpicadas por decisiones ilegítimas y acciones fraudulentas.
«Estamos en una fase de descrédito acelerada de la política y de las instituciones en general. Y cuando tú tienes un problema de confianza en las instituciones, finalmente lo que incubas es un problema de legitimidad de aquellos que te gobiernan’’, explicó De la Fuente.
Tal es el caso de las farmacias Ahumada, Cruz Verde y Salcobrand, que actuaron en conjunto para incrementar el precio de los medicamentos, así como los financiamientos ilegales en campañas políticas, como con Bachelet o el Caso Penta.
“Hoy día la gente se siente frustrada porque, efectivamente, ve corrupción; pero no somos un país corrupto como lo fue en su momento el estallido en Brasil”, ratificó Bettina Horst, subdirectora de Libertad y Desarrollo.