El presidente reprochó a la plantilla su comportamiento y el capitán le replicó culpándole del fracaso en la temporada. Luego la junta debatió sobre Mourinho.
La eliminación europea del Madrid provocó una fuerte discusión en el mismo vestuario del Santiago Bernabéu entre el presidente del club, Florentino Pérez, y el capitán Sergio Ramos, que no disputó el partido porque se encontraba sancionado.
Florentino esperó a los jugadores en la caseta y les reprochó su comportamiento durante el partido. Según pasaban los minutos fue elevando el tono, habló de falta de dedicación, de exceso de días libres e incluso empleó el adjetivo «vergonzoso».
Fue entonces cuando Ramos le replicó, acusándole a él y a su junta directiva de una mala planificación y culpándole del desastre. Florentino llegó a decirle: «Te echo». Y Ramos respondió:»Tú me pagas y yo me voy», llegó a decir el capitán en plena discusión. Y, mirando al presidente, añadió: «Yo lo he dado todo y me he partido la cara por este escudo, por este club y hasta por ti». Toda la plantilla fue testigo de la bronca.
Después, el presidente se reunió con su junta directiva hasta las dos de la madrugada y dejó sobre la mesa la posibilidad de destituir fulminantemente al entrenador, Santiago Hernán Solari, y sustituirle por José Mourinho, cuyas relaciones con Ramos son nulas. Hubo discrepancias sobre la conveniencia de repescar al portugués y, finalmente, no se tomó ninguna decisión, aunque podría retomarse el asunto en las próximas horas.