El exfuncionario afirmó que «las balas no son la respuesta ni la solución a un problema» y que, mientras estuvo el asunto a su cargo, nunca se ordenó el uso de la fuerza militar contra la población.
El ministro de Defensa de Bolivia, Javier Zavaleta, presentó públicamente su renuncia la noche de este lunes (hora local), aclarando que tanto su voluntad como la del capitán general de las Fuerzas Armadas fue «siempre preservar la institucionalidad» del organismo al servicio de la población.
El anuncio fue realizado través de un video en redes sociales, seguido de una carta con su firma. Además, el exfuncionario aseguró que «las balas no son la respuesta ni la solución a un problema» y que mientras estuvo en su cargo, nunca se ordenó la el uso de la fuerza militar contra la población.
«Jamás dimos una orden para que nuestros soldados y marineros empuñen un arma contra su pueblo y jamás la daremos. El Estado que construimos es una Bolivia en la que un militar encara la defensa de su Patria al lado de su pueblo y nunca contra él», expresó Zavaleta.
Finalmente, el exministro se dirigió a quien denunció un presunto fraude electoral y al excandidato presidencial opositor de la alianza política Comunidad Ciudadana: «Señor Carlos Mesa, señor Fernando Camacho, un asunto político no se resuelve aumentando el calibre de la represión«.