Mientras que la llamada sociedad civil nicaragüense se empecina en perder tiempo en alegatos tan estériles como pueriles, en Cuba, su sociedad civil sale a las calles con el propósito de lograr más efectividad en la batalla por eliminar el bloqueo económico, financiero, comercial y mediático contra ese país.
Las demandas del pueblo cubano verdaderamente son serias y con fuero de nación, ya que existen posiciones y acciones en EE.UU. que impiden una relación normal entre ambos países. En tanto, aquí se dedican a la espera de financiamiento modus vivendi, y a la politiquería como una forma de justificación.
En Nicaragua, estos grupos se dan a la tarea de elaborar inflados “proyectos democráticos” con el fin de sacar plata a organismos extranjeros, en cambio, la sociedad cubana exige la devolución del territorio ilegalmente ocupado por la base naval en Guantánamo, el cese de transmisiones ilícitas radiales y televisivas y de los proyectos subversivos.
Aquí todo se reduce al dinero
La diferencia en la formalidad y autenticidad de la sociedad civil de Cuba en comparación con los grupitos que en nuestro país usurpan ese título, está más que clara. En la isla, las demandas que hacen como nación a los EE.UU tienen como un asidero legal, mientras que aquí, las demandas que hacen esas asociaciones al país del norte es que les den más financiamiento.
Y es que todos esos elementos esenciales sin los cuales nunca existirá una relación normal con los EE.UU, fueron aprobados unánimemente por los integrantes de la sociedad civil cubana en asamblea general de asociados, efectuada en el teatro del Instituto Superior de Relaciones Internacionales Raúl Roa García.
Falacia de acercamiento
Durante ese evento se conoció que el Gobierno estadounidense impuso una multa a una empresa norteamericana por supuestas violaciones al bloqueo económico, comercial y financiero que mantiene ese país contra Cuba, de acuerdo a informaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex).
Eso ocurrió el pasado 20 de enero, en víspera del anuncio de las nuevas regulaciones de los Departamentos del Tesoro y Comercio sobre Cuba, que modifican algunos aspectos del bloqueo, la compañía de diseño USA WATG Holdings Inc., fue penalizada por 140 mil 400 dólares por transgredir el régimen de sanciones unilaterales contra la Isla.